MI CASTIGO

PASADO PARTE 1

La sociedad nos enseña a, que los fuertes y hábiles sobresalen como héroes o incluso a competir, en cambio, los demás son predestinados hacer los peones de estos, los mokusei, aquellos sin alguna peculiaridad.

Sobre mi pasar, existió una pequeña cucaracha.

Una maldita cucaracha...

Que al final, me sorprendió.

Me seguía como si de comida se tratase, parecía que anhelaba que la aplastara.

Pero con una edad de un infante, me pareció en cierto modo tierno.

Llego un momento de que por cierta edad y por el género de aquella mujer, me hartaba y su debilidad me repateaba, sin embargo ese sentimiento, al paso del tiempo me exigía el deber de protegerla.

Mi madre me decía que andaba como el típico chico que le gusta una chica, que madre le dice a su niño de 7 años que le gusta una chica de la misma edad, pero al fin de acabo no se equivocaba, era el típico infante, que le pega un chicle a la niña que le gusta, solo para que le mire.

Pero ahora que lo pienso mis travesuras pasaron de un nivel pasable a uno realmente espantoso y realmente fue ahí el epicentro de todo, fue ahí cuando me percate que el sentimiento que llevaba, conmigo no era otro que, amor.

Amor...

Pues si yo también llevo eso en mi interior.

En nuestra secundaria, vi una cara de ti realmente único y no como amiga, tampoco como vecina, sino como mujer. Aquellos deslumbrantes ojos tono esmeralda y sin aplicar el aroma que desprendías, ese olor a jazmines de tu perfume, me encantaba.

Cuando chocábamos por accidente, no sé, si era mi pena o vergüenza, que te terminaba gritando, solo decías lo siento temerosamente y corrías, ojala que olvidaras aquel niño estúpido y agresivo que era antes, y justo después, me maldecía a mí mismo.

¿Por qué eres así, y justo con ella?, Tsk... rayos...

...

Cada vez se acercaba la graduación, traías una preocupación de los mil demonios, eso era por que ibas a presentar el examen a la UA, esa escuela, aquella que anhelabas y deseabas conocer a tu héroe favorito, mi orgullo te hirió.

-Jajaja, tú, un héroe... jamás-

Mi temor actuó, te lance tus libretas al suelo, lo único que me hizo capacitar, fue tu mirada, cubierta de llanto y lo que más me marco, fue una cachetada que dolía como mil agujas, pero me quede es shock, ni te conteste, estático, con un típica bulla,

Aquella cara, mirarla fue lo peor que sentí.

Arrepentido por el camino, de mal humor caminaba solo en un callejón, y de la nada salió una maldita masa, tomando posesión sobre mi cuerpo.

En un principio, me acuerdo ser atacado, por un maldito monstro, no te lo voy a negar, mi temor era morir, solo visualizar un velorio, mi madre llorando sobre un ataúd y tú en ningún lado.

Te buscaba...

Que estúpido soy... me merezco lo que tengo.

Mas sin embargo, una luz me encandilaba, y la primera imagen que alcance a observar fue la tuya, mis ganas de pelear volvieron, no me tenías que ver débil a cualquier imbécil.