Prostitute

Miguel conducía por las calles de la ciudad mientras la lluvia caía con fuerza,  el sonido de la radio se vio opacada cuando un fuerte trueno resonó en el eco de aquella fria, oscua y lluviosa madrugada. Solto un suspiro, estaba tan jodidamente cansado, últimamente tenía más trabajo y eso era bueno, pero no por eso dejaba de ser cansado

Miro a un lado, distinguiendo a una persona parada en la estacion del bus, se sorprendió aún mas cuando noto que era Rubén, quien estaba temblando y esperando en plena tormenta. Freno el auto y bajo la ventanilla, importandole poco si se mojaba, Rubén lo vio dudoso y al final, solo aparto la mirada

-Sube, te llevo a casa

Rubén dudo, pero luego de una mueca triste y decepcionada, subio al auto y se puso el cinturon de seguridad, Miguel le tendio una toalla que tenia entre la ropa que habia enviado a la tintorería y Rubén la tomo entre sus manos, estaba temblando y se veía mal

-¿Alex te dejo aquí? -Pregunto y Ruben nego con decepción-
-Fue Eduardo, me dejo plantado -Dijo y miro a Miguel- Gracias
-No es nada -Dijo y sonrió- ¿Te llevo a casa de Alex?
-Uh. No -Dijo y miro a otro lado, avergonzado y dudoso- ¿Podemos ir a tu casa? No quiero dar explicaciones de nada

Miguel no dijo nada, solo manejo hacia su casa, estaba cerca y lo mas conveniente seria que Rubén tomara una ducha y probablemente cene algo.

Cuando llegaron ambos corrieron a la puerta, Miguel abrio y espero a que Ruben entrara para poder cerrar la puerta una vez entro, cerro y camino a la sala

-Todo sigue igual -Solto Rubén con nostalgia y Miguel asintió-
-Incluso tu habitación esta igual a como la dejaste -Murmuró Miguel- Ve a darte una ducha, hay ropa en mi cajón
-Esta bien, gracias -Dijo y comenzó a caminar hacia las escaleras-
-Rubén -Lo llamo y este voleto a verlo, Miguel suspiro- ¿Quieres cenar?

Rubén asintió y murmuró un "Estaria bien, por favor" Miguel no dijo más y camino hacia la cocina, preparo cualquier cosa rapida y espero a que Rubén bajara, cuando este lo hizo su corazón casi se sale de su pecho y es que Rubén se veía hermoso con su ropa. Lastimosamente, no podía decir nada

No queria hacer las cosas mas incomodas de lo que ya eran...