Alan.

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La cafetería en la que Callie se encontraba tomando un café americano se llamaba cofficat's, claro que el nombre no era el atractivo para Callie, le encantaba el frío silencio del lugar, pedía café americano no porque le gustara, sino porque era lo único de la cafetería que tenía un sabor decente.

Por la ventana pudo ver a Alan Evans, él era de Inglaterra, era su vecino, vivía dos departamentos después de el de ella y eran ''amigos'', o al menos algo así, habían salido por un tiempo y para ese entonces solo los unía una amistad con ciertas insinuaciones, ellos hablaban y se agradaban, los viernes por la tarde Alan iba al departamento de Callie, donde se reunían para tener sexo, pero su relación era más que eso, eran como mejores amigos, pero no eran amigos.

Alan la vio por la ventana de la cafetería y entró, incrédulo se sentó en el asiento del reservado enfrente de Callie.

- Te extrañé anoche, ¿saliste a algún lado?

- Si, paseé por el lago, lo siento, también te extrañé.

- ¿estás libre hoy?

- Si.

- ¿salimos?

- ¿de cuándo a ahora te gusta salir?

- Bueno, solo quiero estar contigo, pero si no te gusto de esa manera siempre está el plan b.

- Ok, salgamos.

Comenzó a llover, más bien era una brisa de agua, eso no le impidió a Alan llevar a Callie al parque de las afueras, fue caminar por un largo tiempo, pero ellos se agradaban, y charlaban, así que estaban muy distraídos como para sentir cansancio, hablaron durante mucho acerca de cosas que Callie jamás se imaginó hablar con el chico que iba a su departamento todos los viernes a hacer el amor, como parte de una rutina. Hablaron de la vida, de lo que les pasara en la mente en ese momento, como se sentían, que harían para mantenerse cuando sus trabajos de temporada acabaran, e incluso hablaron de su relación, no lograron tocar mucho ese tema, ya que para cuando Callie se sentía dispuesta a preguntar si algún día su amorío se convertiría en un relación formal, el anunció su llegada al parque.

- ¿Qué opinas?

- Es lindo – Contestó ella.

- Si, mis padres solían traerme aquí, se ve mucho mejor cuando no hace tanto frío como ahora, en temporada de verano.

- Te creo, espera... Quédate justo donde estas, no te muevas en los más mínimo.

- Ok

Callie sacó su celular, que era lo único que tenía en ese momento, y le tomó una fotografía.

- Eres perfecto.

- Sin duda habrá quienes opinen lo contrario, ¿Puedo ver la foto?

- Solo si me atrapas.

- ¿Atraparte?

- Si.

- Te capturaré Callie.

Era la escena perfecta, ambos corriendo, Callie tenía los brazos extendidos y se balanceaba de un lado a otro mientras corría, Alan la seguía detrás. Se encontraban en un paisaje de árboles que hacía una combinación perfecta con los colores del cielo y la temperatura fría.

Corrieron hasta que Alan la alcanzó, y se tumbaron al pasto besándose previamente, haciendo un contacto visual, como si todo el parque, las casas, y la acera se esfumaran y solo quedaran ellos dos, solo ellos dos, nadie más.

Alan era una persona amable, inteligente y divertido, era esa clase de persona con la que puedes hablar todo el día sin aburrirte, no era repetitivo, tenía charlas profundas y largas, lo cual Callie amaba, amaba escucharlo, amaba que él la escuchara. Claro que eso no pasaba siempre, sus reuniones de los viernes no les dejaban tiempo de sobra para hablar, pero ese día había sido distinto, tuvieron una conexión única con solo contacto visual, se dijeron muchas cosas con sus ojos, cosas profundas.

- Me encantas.

- ¿te encanto?

- Más que eso Callie, eres perfecta para mí, y necesito más tiempo contigo como este día, no solo una hora los viernes.

- ¿por qué debería creer que quieres algo más?

- Porque te amo.

- Wow – Contestó alterada. – nos vemos una vez a la semana y ni siquiera hablamos, y ahora de repente estás enamorado?

- Si, digo, por qué estas sorprendida, tú me gustas y estoy enamorado de ti.

- No puedes hacerme esto, es injusto.

- ¿Qué?

- No puedes esperar que yo acepte que estés enamorado de mí, no te conozco y no me conoces, en lo más mínimo, solo tenemos sexo rutinario.

- ¿Es pura rutina para ti? ¿no sientes nada más en serio?

- Alan, quiero irme de Ámsterdam.

- Espera... ¿Cómo que irte?

- Ya no quiero estar aquí, tengo muchos recuerdos que deseo borrar.

- En serio, ¿Cómo qué recuerdos quieres borrar huyendo?

- ¿Lo ves? , no me conoces

- Eres increíble Callie, te digo que te amo y te molestas conmigo, no sé por qué... No sé en qué pensaba, creí por un momento que me dirías lo mismo y tendríamos una relación formal de nuevo.

- Pero, estamos bien así, en serio, no quiero salir lastimada, y me iré en unos días, jamás va a funcionar.

- No si te vas.

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⏰ Última actualización: Dec 08, 2017 ⏰

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