Juliana23:00 hs.
Ya eran veinte minutos tarde y aún no había salido de la casa.
Tenía que ir a un bar muy grande en el centro de la ciudad a encontrarme con Marco.Le eché un vistazo al espejo, la camisa azul y los pantalones marrones quiza eran demasiado para un bar como el "Red Dress", pero era mas o menos como acostumbraba a vestir usualmente, así que no me preocupé para nada.
Tomé el auto y me fuí sin siquiera pedirle a Mike qie viniera conmigo. El bar quedaba bastante cerca y lo mas importante de todo era que los dueños del lugar no se inclinaban ni por una ni por otra delas familias por lo que, se suponía, era un lugar seguro para ambos.
Unos ppcos minutos de conducir por las calles llegué al"Red Dress", era bastante temprano y no había mas que una veintena de personas.
Busqué a Marco y lo encontré hablando con una rubia que no paraba de reir.
Así que me acerqué a la barra y le pedí al hombre que servía las bebidas una soda con limón.-Ya llegó por quién rogabas linda-me susurró alguién al oído.
-Lo siento tengo nov...- balbucié una respuesta pero corte mi frase al ver al menor de los Vespasiani sentado al lado mío.
-¿Acabas de decirme linda?- pregunté alzando una ceja.
-Sabes perfectamente que np eres fea- contestó encogiendose de hombros- si no, no saldría contigo.
-No salgo contigo- me crucé de hombros y lo mire fijo- tengo nov...
-Se que tienes novio- me interrumpió con gesto de fastidio- ya puedes dejar de repetirlo, además no estariamos aquí si no fuera por ti y tu estúpida clase de spinning.
-Tu me secuestraste- grité susurrando- además no iba a perderme esa clase por nada del mundo.
-No importa- dijo y le dió un sorbo a mi vaso- ¿Soda?¿Es en serio?
-Si, no voy a beber para perder el control de mi misma hasta terminar lo que sea que debemos hablar.
-Cierto, ayer no respondiste si vas a trabajar conmigo o no.
-Nop- respondí y apuré lo que quedaba en mi vaso- ¿Por qué no vas con la policía?- me encogí de hombros- Es lo que se supone deberías hacer.
- Si es verdad- puso los ojos en blanco- y se supone que los novios deben saber todo sobre el otro así que supongo que no te
molestará que le diga en que negocios anda metida su noviecita.Al ver que me quedé muda sonrió altanero y se acercó mucho a mi rostro.
-Sabía que estarías encantada de participar.
Tragué en seco, debí haber escuchado a Papá cuando me dijo que nunca deje que usen mis puntos debiles en mi contra, pero ya era demasiado tarde.
Si bien habían pasado varias semanas desde el comienzo de las clases, no entendía por que ese hombre que me detestaba ahora me obligaba a ayudarlo.
Simplemente escapaba a toda lógica, igual siempre supe que todos los Vespasiani estaban locos.-Bien pero dime- lo miré a los ojos-¿Porqué quieres hacer esto?
El sonrió de lado y sin más respondió:
-Cuando los buenos ignoran las cosas malas que pasan a los malos no les queda otra que jugar a ser los buenos.
Lo miré incrédula.
-No sabía que eras filósofo, claro que los tres años sabáticos que te tomaste en China debieron hacer efecto- una mueca burlona apareció en mis labios al pronunciar esas palabras.
-Bien- puso los ojos en blanco- la nueva droga es altamente adictiva, mis clientes ya no compran extasis para sus fiestas ahora compran esa porquería.
-Era obvio que tus motivos no eran tan nobles Marco- reí- después de todo los dos sabemos quien eres.
-Como sea- se puso de pie abandonando la barra- vamos a otra fiesta.
Me puse de pié y lo seguí intrigada hasta afuera del bar donde lo esperaba su chofer y una limusina.
Ambos subimos al vehículo y Marco cerró la ventanilla que nos comunicaba con el chofer.
Marco me miró con desaprobación y tomó una bolsa que estaba en uno de los asientos.
-Vamos a una fiesta de electro ilegal- explicó- como supuse que ibas a venir asi vestida, me compré la libertad de traerte algo mas adecuado.
¡Rayos!
Tomé la bolsa que me arrojó y encontré un top negro y un diminuto short blanco, además de unos altisimos tacones planteados.
Tragué en seco, hace mucho tiempo que no usaba este tipo de ropa, desde que empecé a salir con Stephano en realidad.
-¿Puedes cerrar los ojos?- pedí al ver que me observaba con atención.
El puso los ojos en blanco, pero luego se puso una de esas mascarillas para dormir que impiden la visión.
-¿Feliz?- el fastidio en su voz era evidente.
-¡Si!- murmuré entre dientes- gracias.
Comencé a desvestirme y me puse lo que Marco me habia dado ¡Por todos los cielos el short ni siquiera me cubría la mitad del trasero!
-Ya esta- dije cuando terminé de vestirme.
El se sacó el antifaz y me miró de arriba a abajo.
-Me gusta como se te ven las tetas con eso.
-Cierra el pico Vespasiani, para la próxima me traigo yo la ropa.
-Como quieras.
La limusina se detuvo al frente de lo que parecía una fábrica abandonada.
Bajamos del auto y Marco.se aferró de mi cintura.
-Vamos a fingir que estamos juntos ¿De acuerdo?
-Claro ¿Me voy a cambiar el nombre también?- estaba molesta,me encontraba prácticamente desnuda y mi enemigo a muerte me daba ordenes mientras me agarraba por la cintura.
-Claro que si- se puso la mano en el mentón- necesitas un nombre mas de zorra ¡Ya se! Esta noche seras Tatiana Fox.
-¿Es un chiste verdad?
-Claro que no, vamos adentro.
Entramos al club y por suerte ya no me sentía tan fuera de lugar.
Pronto alguien se nos acercó y nos ofreció una ampolleta como la que mató a Alexander.
-¿Cómo se llama esto?- le pregunté gritando al hombre que me pasó el frasco.
-Pólvora,linda.
Miré el frasco con atención y noté algo importante, no tenía ninguna cobra impresa.
Holas les dejo en multimedia al hermoso Marco, pero cada uno se lo imagima como quiere.
Besos!
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Maroni
ActionNomacorc es una ciudad extraña, es la cuna de una interminable guerra entre dos poderosas familias. Pero los problemas crecen cuando los herederos de estas familias se conocen y deben terminar con una droga que amenaza con sacar a las demas sustanci...