CAPITULO 2

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¿Sirven las técnicas de control de estrés para controlar la presión arterial?

La relajación es una técnica de autocontrol del sistema nervioso que puede ser utilizada como ayuda para el control de la hipertensión arterial.

La hipertensión en niños

Generalmente, pensamos que es un problema que afecta a los adultos. Pero, de hecho, esta afección puede estar presente en cualquier edad, incluso en la infancia. Alrededor de cinco de cada cien niños tienen presión arterial más alta de lo normal, aunque menos de uno en cien tiene hipertensión considerable desde el punto de vista médico.

En muchos casos, parece desarrollarse con la edad. Como resultado, el niño puede no mostrar signos cuando es un bebé, pero puede desarrollar la afección a medida que crece. Los niños que tienen sobrepeso son mucho más propensos a tener este padecimiento (así como otros problemas de salud). Por eso, los buenos hábitos de alimentación (sin comer en exceso y sin exagerar las comidas con alto contenido de grasas) y abundante actividad física son importantes durante los primeros años de vida (y durante el resto de su vida).

En la mayoría de los casos, salvo en los casos provocados por la obesidad, no puede identificarse una causa conocida. Sin embargo, cuando la enfermedad se vuelve grave en los niños, es generalmente un síntoma de otro problema grave, como enfermedad renal o anormalidades del corazón o del sistema nervioso o endocrino (glandular).

Afortunadamente, la presión arterial alta por sí sola rara vez causa problemas graves en los niños y puede controlarse mediante cambios en la dieta, medicamentos o una combinación de ambos, los síntomas en los niños y en los adultos son los mismos.

Una vez que el pediatra sepa que el niño tiene presión arterial alta, querrá controlarla con frecuencia para asegurarse de que la hipertensión no se esté volviendo más grave. Según cuán alta sea la presión arterial alta, el pediatra puede remitir al niño a un especialista en hipertensión infantil, generalmente, a un nefrólogo (especialista en riñones) pediátrico o a un cardiólogo (especialista en el corazón) pediatra. Si empeora, se puede tratar con medicamentos, así como con dieta y ejercicio.

Hay muchos tipos de medicamentos disponibles, que actúan a través de diferentes partes del cuerpo. Primero, el pediatra tal vez recete un diurético, medicamento que aumenta la eliminación de sal (sodio) en la orina, antes de probar medicamentos más fuertes. O, si esto no hace que la presión arterial del infante vuelva a la normalidad, se le recetará un medicamento antihipertensivo* . Cuando se haya controlado la presión arterial con dieta o medicamentos, es importante continuar el tratamiento de acuerdo con las recomendaciones de su médico, incluidos los cambios en la dieta. De lo contrario, la hipertensión regresará.

Cuidados

El tratamiento es para toda la vida, y puede incluir desde modificaciones en el estilo de vida hasta el uso de medicamentos, dependiendo de la gravedad de la condición. Las medidas no farmacológicas son aplicables a toda la población, como prevención primaria y a la población hipertensa, como parte inicial y fundamental del tratamiento. Éstas incluyen:

- Lograr y mantener un.

- Moderar el consumo de sal en la especialmente sujetos con diabetes.

- Asegurar el consumo de frutas y verduras diariamente.

- Controlar los niveles de colesterol en sangre.

- Realizar actividad física moderada diariamente.

- Evitar el consumo de tabaco.

- Evitar el consumo de alcohol.

Sin embargo, el factor más importante para controlar la hipertensión es la . Las siguientes son algunas recomendaciones dietéticas para ayudar a lograr estos objetivos:

Consumir alimentos frescos que contienen menos sodio.

Evitar la adición de sal a los alimentos durante la preparación o en la mesa.

Recurrir al uso de especias y hierbas aromáticas para resaltar el sabor de los alimentos.

Recurrir al uso de sustitutos de sal, que contienen la mitad de sodio que la sal de mesa.

Recurrir al uso de sal marina, ya que, por ser más fuerte, permite emplear menor cantidad para lograr el sabor deseado.

Evitar el consumo de alimentos industrializados, de ser así, leer las etiquetas de valor nutrimental antes de elegirlos.

Preparar alimentos y congelarlos para evitar acudir a los precocinados, que son ricos en sodio.

En los restaurantes elegir el menú ensaladas, aves o pescados a la parrilla en lugar de fritos o guisos. Para evitar la adición excesiva de salsas se puede pedir que éstas se sirvan a parte, y adicionarla con moderación.

Optar por alimentos al vapor, asados, cocidos, hervidos en lugar de empanizados, fritos o con salsas añadidas.

Preferir el consumo de aceite de oliva en lugar de aceite de maíz, margarinas, mantequilla y mayonesa.

Moderar el consumo de café.

Asegurar un consumo adecuado de calcio a través de leche y derivados.

Si el médico indica el uso de algún medicamento, éste mostrará un mejor efecto si se combina con hábitos adecuados en el estilo de vida. Hacer cambios en el estilo de vida puede ser difícil; es recomendable adoptar un cambio a la vez.

Ya que las complicaciones pueden ser severas o mortales, consulte con su médico la mejor manera de controlar su presión arterial. Las siguientes condiciones podrían manifestarse si no toma medidas para controlar su presión alta:

Arteriosclerosis (daño a los vasos sanguíneos)

Daño al cerebro

Insuficiencia cardiaca

Daño a los riñones

Insuficiencia renal

Ataque al corazón o infarto

Enfermedad cardiovascular

Derrame cerebral

Perdida de la vista

HipertensionWhere stories live. Discover now