Aramí estuvo desaparecida por 3 días, en 3 días pasaron muchas cosas. Se filtró un vídeo dónde al chico de la motocicleta, que había huído, no lo mató ningún ente, lo había matado ella, quién ensangrentada lo perseguía, con sólo mirarlo a los ojos, el chico se elevó a los aires suplicando por su vida, entonces ella, lo dejó caer sobre una gran roca que se encontraba a un costado, el chico se rompió varios huesos, pero no había muerto, ella del cabello lo arrastró al bosque, y era todo lo que pudo captar la cámara de esa casa de color crema y murallas blanca.
El día que Aramí desapareció, el señor que visitó aquél día el almacén, también lo hiso, y fué hallado crucificado en el bosque al lado de un callejón. La señora madre de Aramí, fue interrogada por la policía, y ella, sólo lloraba lamentando que su hija, haya resultado como su maldito padre. Así, el día que Aramí apareció, la madre tomó una decisión, fué a su cuarto, para deshacerse de ella y liberar su alma, antes de que ella, se convirtiera en un ente malvado y errante que camine por las tierras.
Ya que, en los relatos de los indios, existía el relato del origen del Pombero, el Pombero, era un indio brujo de la tribu guaraní hace más de cientos de años atrás, remontado a la época de la conquista de América, el indio brujo no aceptaba que los colonizadores hayan acabado con todas sus tradiciones, y así, se acercó a Satanás, pidiéndole que le diera el poder para acabar con todos.
Como el no había específicado lo que quería, Satanás se aprovechó de ésto, después de todo el era astuto y malvado, vió la oportunidad de conseguir almas a través del iluso indio,y entonces lo transformó en un ente, visible para aquellos que él deseaba que lo vieran, alguien que podía ser bueno con quién quisiera y malvado con quiénes le fallan, y así, durante todas las noches, su alma se fue pudriendo y transformándose en un ente del mal, Satanás no sólo le dió el poder a él, sino que también a sus descendientes, quiénes heredaban los poderes de su padre, pero a cambio de sus almas, que se volverían uno con la noche.
El pacto, estaba hecho, y así fue, como a ese indio brujo lo llamaron "Pombero", uniendo las palabras "Po"(manos) y "Mberu"(moscas), llamándolo así POMBERO, ya que todo lo que tocaba quedaba maldito, y se lo encontraba a él en todas partes donde la noche cayera en los profundos bosques, así como las moscas eran vistas por todos lados. Ella, no quería que su hija se volviera una con la noche, así, fue a su cuarto con un cuchillo, pero ya era tarde, pues quien ahí estaba no era más su amada hija, ella, era otro ser, que la miraba macabramente.
- Nos encantará tener tu alma, sin descanso eterno -pronunció finalmente Aramí con una voz más gruesa, seguida de una macabra sonrisa. El cuchillo, empezó a clavar el cuello de la mujer, quién luchaba por su vida.
- Si yo me voy, tú también te vas -dijo con una sonrisa la señora mientras se abrazó a su hija, y la tiró contra el espejo del armario, los espejos se incrustaron al rostro de Aramí, y algunos trozos que eran los más largos, le atravesaron el ojo derecho y el cráneo. Aramí había muerto, y su madre llorando, dió su último suspiro de vida, cayendo sobre el inerte cuerpo de su hija.
Aramí murió y su alma, se ha vuelto un ente amante del Pombero, y vaga con él en las noches, en busca de ofrendas, para arrebatar almas con astucia y así entregárselas a su amo y señor, que tenía una cuenta pendiente que saldar con Satanás.
Al día siguiente el cuerpo de Ña Reyna fué hallado, lo llamaron suicidio, pero de Aramí, solamente quedaba su ropa. Varios de los vecinos, dijeron ver a Aramí caminar desnuda hacia la oscuridad del bosque, por días la buscaron, incanzablemente, pero jamás...la han vuelto a ver...
Y es así, como hasta el día de hoy, existen casos de muertes inexplicables, que siguen sin resolver, cuerpos son hallados crucificados, o abandonados en cuevas. Y queda a criterio tuyo, creer en la existencia de éste ente, llámalo como quieras, "Pombero", "Duende", "Espíritu", pero de algo es seguro, y es que aún, hasta la actualidad, siguen ocurriendo casos de avistamientos del Pombero, hombres y mujeres hallados sin vida en el bosque, abandonados o crucificados, casas que son visitadas por el piar de pollitos sin que los dueños de la casa o vecinos tengan pollos, y aveces, no te asustes si en las noches en que caminas solo/a en las calles oscuras, escuchas un silbido que parece distante pero que en realidad, está advirtiéndote que está detrás tuyo...
Fin.
Ésta historia está basada en la un ser de la mitología Paraguaya, que hasta el día de hoy sigue viva en la vida y boca de las personas. Encontrarás muchos relatos de personas que se han topado con él o que al menos lo han escuchado, también encontrarás a aquellos que se atrevieron a llamarlos en las noches o a imitarlos, y hasta el día de hoy, viven sufriendo las consecuencias.
La historia narra algunos de los hechos que más se narran que ocurre a menudo, que recolecté de personas que han escuchado o vivido ésta situación, pero, la historia en base al personaje de "Aramí" y su madre "Ña Reyna", es algo ficticio inventado por mí, así que duerme tranquilo, que en verdad los personajes no existen, pero sí, te aseguro que existe EL POMBERO...
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Hija de la noche
HorrorElla ha vivido una vida aparentemente normal, como cualquier muchacha. Todo parecía normal hasta que el problema inicia cuando cumple sus 18 años, pues en ese día llega un desconocido para ella, pero conocido para su madre, llenándola de preguntas...