pasea conmigo hasta el fin

14 TIEMPO A SOLAS

Abrí mis ojos y volví a estar en la carpa de madame Namina, estaba recostada en unos cojines y tenía un pañuelo colorido y delgado sobre mí, estaba sola. Me puse de pie –como mejor pude- y mire a mí alrededor, luego la pequeña y anciana gitana entro

-      Despertaste, yo avisar a tu madre

-      No – dije casi gritando

-      ¿no?

-      Yo… quiero… emmm – ok no podía decir una frase, me dolía la cabeza y tenia imágenes apareciendo y desapareciendo – necesito…

-      Estar bien, sígueme

La anciana me guio a la parte trasera de la carpa –desde fuera no parece tan grande- y abrió un cierre dejando al descubierto otra “puerta” yo salí y le di las gracias. Comencé a caminar por entre los árboles y veía niñas, jugando sentadas, corriendo y riendo, eran yo pero, se veían figuras borrosas y a mi venían recuerdos, comencé a girar para ver detenidamente lo que hacían todas las yo pequeñas, pero de repente una niña, con un vestido colorido y unos grandes ojos negros se me acerco

-      ¿está bien señorita? – ella era real

-      Sí, yo… solo, me perdí – le di una sonrisa a la niña

-      Yo la guiare a la entrada del parque si quiere

-      Si gracias

No volví a casa, no conteste el teléfono, no llame a nadie, solo camine y camine. Llegue al final de la ciudad donde había un bosque, con dexter venimos a acampar en las vacaciones, hay un lago precioso el cual por las noches refleja la luna y las estrella, sin saber el porqué siempre me eh sentido atraída a ese lago, así que camine hacia él, pero claro ya era tarde y estaba oscureciendo y corría un poco de viento.

-      Deberías volver, ya es tarde y están preocupados por ti – me di la vuelta y pensé que estaba soñando pues De estaba justo atrás mío

-      ¿me quede dormida?

-      No, solo que ahora puedes verme, creo habértelo mencionado –dijo con una sonrisita

-      Sí, pero no pensé que… no importa. No volveré, aun no estoy lista

-      Pero lista ¿para qué?

-      Para enfrentar a mi madre, y obviamente al preocupado de mi hermano

-      Pero no puedes quedarte en el bosque sin nada, te dará hipotermia o algo

-      ¿y donde quieres que valla? – el lo medito un momento y luego hablo

-      Sígueme

De “camino” a mi derecha unos centímetros más adelante que yo, decidí guardar silencio mientras él me guiaba por el bosque, de verdad debo estar loca, quizá debería internarme a un siquiátrico, ver un chico que supuestamente es hijo de la luna no es normal, quizá tengo un tumor en el cerebro que esta aplastando mis neuronas.

De repente llegamos a una especie de cabaña –o quizá solo madera apilada- De entro en la “cabaña” sin siquiera abrir la puerta o una ventana. ¿Quién demonios se cree? Quizá es un fantasma y la anciana me mintió cuando dijo que era hijo de la luna, o quizá de verdad estoy bien loca. Luego salió

-      Hay una cama con unas frazadas, puedes dormir allí

-      Dime que no hay hongos o algo

-      No es la cosa más linda, pero… - comencé a abrir la puerta con una sonrisa y lo pare

-      Yo eh estado aquí – fruncí el ceño –contigo