"EPILOGUE: I Will Find You"

Capítulo 34: Un cambio de manos.

Los próximos minutos son algo borrosos.

Después de mucho gritar y temblar, Hajin logró sacar a Chaeryung de su silencioso aturdimiento el tiempo suficiente para llevarla de vuelta al refugio de la casa, donde les dieron toallas limpias y té caliente. El color volviendo a las mejillas y los labios de Chaeryung, el siguiente pensamiento de Hajin fue de So y cuánto tiempo había estado bajo la lluvia.

"¿Ha regresado?" ella le pregunta a una de las mujeres que los atiende.

"No lo he visto, señorita", viene la respuesta de disculpa. "Todos nos separamos y no tengo idea de dónde fue".

"Lo vi salir de la propiedad", dice otro, "aunque no sé hacia dónde fue".

Ansiosamente, Hajin retuerce los dedos y recorre la habitación, tomando la taza de té que se le ofrece pero sin beberla, solo usándola para calentar sus manos rígidas.

Finalmente, cuando ella determina que ha esperado lo suficiente, deja su taza y declara que volverá a buscarlo. Ignorando todas las protestas, agarra un paraguas al azar y se precipita en la oscuridad e inmediatamente choca con alguien.

Ella grita.

"¡Yah!" una exclamación de sorpresa saluda su reacción, seguida por un par de manos que agarran sus brazos agitados. "¡Yah, soy yo, deja de gritar!"

"¡Tú!" ella chilla, dejando caer el paraguas y acortando la distancia entre ellos con un abrazo feroz. "¿A dónde fuiste? ¿Qué te llevó tanto tiempo?"

"Solo me fui unos minutos".

"¡Media hora! ¡Bajo la lluvia!" ella chasquea. "¡Estaba preocupada!"

"¿Tu amigo ha desaparecido y te preocupas por mí? No tenía idea de que te importara tanto. Soo-yah, estoy conmovido". Pero sus burlas solo la antagonizan.

"La encontré", dice otra vez. "¿A ninguno de ustedes se les ocurrió que podría estar en el estacionamiento? La vi en 5 minutos".

"Al ver ella no tiene automóvil ni nada en el estacionamiento, bajo la lluvia a altas horas de la noche..." So lo señala con naturalidad, "no, no se nos ocurrió a ninguno de nosotros. Lo pensé más probablemente ella salió a comprar algo. Hay una pequeña tienda en algún lugar en el camino. Fui a preguntar si alguno de ellos la había visto. ¿Qué estaba haciendo ella en el estacionamiento de todos modos?"

"No lo sé", admite Hajin en voz baja, recogiendo su paraguas desechado y dándole un golpe final, pequeño por si acaso. "He intentado convencerla para que responda, pero hasta ahora ha sido muy estricta. ¿Crees que tiene algo que ver con Won?"

Se asoma a la habitación y dice: "Sí".

"¿Todo bien, agassi?" Chaeryung pregunta inmediatamente en el momento en que Hajin y So entran.

Sorprendido, Hajin solo puede decir: "¿Perdón?"

"Voy a pasar la noche contigo y con Myunghee-shi", explica, manteniendo una distancia firme entre ella y el hombre que está a su lado.

"¡Ah! Sí. Hay dos camas y unnie comparte la mía. Eres libre de llevarte la otra".

Aliviado, Chaeryung asiente e inclina la cabeza hacia Won. "No hay necesidad de molestarte más, Won-nim. Por favor, vuelve a la cama".

"Aun así, estás empapada y congelada", dijo Won, tomando su toalla desechada del sofá e intentando envolverse alrededor de sus hombros, pero ella lo agarra, le agradece con un último asentimiento y se va hacia las escaleras.

La miran pasar en un incómodo silencio, después de lo cual Won les dice a los otros dos buenas noches y la sigue.

"¿Qué fue eso?" Hajin le susurra a So cuando apagan las luces y cierran las puertas.