Me da rabia.
Todos bailaban, reían, jugaban, hablaban, bebían y comían con sus amigos y parejas e incluso hasta con sus familias, todos excepto yo. Estaba sentada viendo como todos los amigos de mi padre y sus familias convivían entre todos, se podría decir que verlos era "Divertido" de un cierto modo. Pues habían hombres y mujeres borrachos riendo y hablando idioteces.
-¡I'm faded! ¡I'm faded! ¡sou lost!- Cantaban los hombres en conjunto, totalmente desafinados.
Extremadamente gracioso.
Seria mas divertido si tuviera a alguien con quien burlarme de estos borrachos, pero no hay nadie que tenga mi mismo sentido del humor que yo.
-¿Sigues sola?- me pregunta Demian tomando asiento al lado mio.
-No estoy sola-Afirmo- Estoy disfrutando de la hermosa presencia de la soledad- Le sonrió inocentemente sin mostrar mis dientes.
-Oh, perdón es que no me di cuenta- Dice en un tono sarcástico. Ruedo mis ojos ante su comentario.- La gente de aquí es rara.- Cambia el tema.- Mejor dicho, los adolescentes de aquí son raros.-
Enarco una ceja-¿A qué te refieres?- Volteo y me topo con los ojos esmeralda que tanto me gustan de mi hermano.
No lo niego, Demian es extremadamente lindo, sus ojos son sencillamente hermosos, su cabello es oscuro y ondulado casi como el mio-a excepción de que el mío es platinado- su piel no es tan pálida como la mía, es un poco mas oscura. El problema es que es extremadamente inmaduro. Rara vez se toma algo en serio.
-Me refiero a sus pasa tiempos- Aclara- Por ejemplo Robert-Señala a un chico de pelo naranja.- le gusta coleccionar piedras- Yo lo miro extrañada. Después se supone que yo soy la rara. Idiota.
-Oh, que interesante pasa tiempo- Digo con un sutil tono sarcástico. Demian solo rió ante mi comentario.
Negué con una sonrisa divertida en mi rostro y dirigí mi mirada hacia el otro lado, note a mi padre cogiendo su abrigo, se lo puso y se dirigió hacia mi.
-Vamonos.- Dice serio y sigue de largo hacia la salida. Demian se levanta e imito su acción, seguimos el mismo trayecto de mi padre hasta llegar al coche. Los cuatro entramos, mi padre en el asiento del piloto,Ian en el de copiloto, Demian detrás de mi padre y yo detrás de Ian. Puso en marcha el coche, salimos de la mansión e inicio el curso hacia la casa.
***
Me encontraba en mi cuarto acostada viendo al techo, no me había cambiado, seguía con el vestido blanco con rosas y enredaderas dibujado en él, siendo sincera tenia flojera de cambiarme, no quería hacer nada solo quería echarme a dormir por toda la semana. Estaba empezando a quedar dormida hasta que escuche tres "toc" contra mi puerta.
-Elsa, baja papá nos quiere hablar.- Me informa Ian desde el otro lado. Yo solo me quede cayada para hacerle la ilusión de que estaba dormida.- ¿Elsa?- Vuelve a tocar-Elsa...- Vuelve a tocar.
No escuche nada después, jure que se había ido así que me pare y me cambie de ropa. Después me lancé en mi cama para retomar el sueño hasta que volví a escuchar los tres "toc"
-Elsa, por favor abre- Bufe al escuchar de nuevo la voz de Ian. ¿Nunca se cansa?
-¿No me puedes dejar dormir?- le pregunto en un trono de voz fastidiado.
-Papá quiere hablar con los tres- Repite- Ahora.
Rodee los ojos y salí de mi cuarto dejando la puerta medio abierta. Baje las escaleras junto con Ian y nos dirigimos al despacho de papá. Al llegar vimos a Demian sentado en los sillones de cuero blanco que tanto le gustaba a mi papa. El despacho no era nada fuera del otro mundo, los sillones de cuero blancos, el escritorio de madera oscura con los lapices las carpetas y la lampara que mi papá usaba para trabajar, en el centro de la habitacion una alfombra color rojo oscuro de pelaje peludo, estante a las esquinas con miles de libro y detrás del escritorio de mi papá una gran ventana hacia el jardín. Repito, nada fuera del otro mundo.
Tome asiento, me recosté de éste y apoye mi codo con el sillón dejando caer el peso de mi cara en toda mi mano. Se podría decir que en mi cara se notaba lo que sentía. Fastidio, cansancio y sobretodo flojera.
Le habitacion se quedo en silencio para nada incomodo, es más hasta podría dormir aquí si nadie se limita a hablar.
-Bueno...-El bigotudo rompe el silencio. Maldición, se tenia que poner a hablar.- Como sabrán mañana me voy de viaje- Lo sabemos, lleva diciendo eso toda la velada.- Hoy hablando con mis amigos, me dieron la sugerencia que inscriba a Elsa en su antiguo instituto muchachos.
¿¡Qué!?
-¿Hablas de Diswork? ¿Mi Diswork?- Dice Demian con una sonrisa de alegría en su rostro.
-No es tú Diswork Demian- Ian susurra.
-Siempre fui más querido allí y tu siempre tuviste celos de eso Ian.
Ian y Demian son gemelos, oh algo así, lo único que los diferencia son su cabello y sus ojos, Ian en vez de tener el pelo ondulado y oscuro, lo tiene platinado como yo y liso como mi padre. Y sus ojos en vez de ser verde esmeralda, son azules celestes, como los míos. Tampoco lo negare, Ian es muy guapo, solo que es extremadamente serio. Rara vez ríe.
Son el Jin y el Jan. Totalmente opuestos, pero así se complementa. Oh bueno, eso dice Demian. Ian rodó los ojos ante su comentario haciendo que yo sonría.
-Como decía, Elsa mañana iras a Diswork- Yo abrí los ojos como platos ¿Otro cambio de instituto? ¿¡De nuevo!?
-¿Otro cambio? ¿¡De nuevo!?
-Sí ¿Algún problema?- Enarca una ceja.
-¡SI! Muchos- ¿Que coño haces? - Me llevas cambiando desde que mamá murió.- ¡Mierda! ¡¿Que coño hago?!
-¿¡Y!?
-No quiero otro cambio papá- ¡Hay!- por fin hice amigos en Workdis, me siento bien allí, los maestros son bueno, la educación es muy bueno y... Las personas soy amigables
Se quedo callado ¿Lo pensó? ¿Lo esta pensando? ¡¿Me esta haciendo caso!?
-Los maestros no son buenos, son mediocres, la educación igual que ellos es mediocre y las personas son falsas y mentirosa.- Mierda, ¿Nada le gusta?- Ahora ve y duerme, mañana tus hermanos te llevaran al instituto y vas a ver que es mejor que Workdis. Ahora a tu cuarto.-
-Papá por favor.
-Elsa, a tu cuarto
-Escúchame por tan solo una vez.
-Elsa.
-No es como tu piensas, yo se que...
-¡Elsa Eclipsa Young Arendell!-Dice en un tono de voz algo elevado mirándome con cara de pocos amigos.- Dije no, no te quedaras en ese instituto, no veras más a esa gente y no me vas a conversen ¿Entendiste?Ahora a tu cuarto.
Sali de allí corriendo a mi cuarto, al entrar azote la puerta tan fuerte que se escucho el golpe por toda la casa, al menos eso creo. Me lance en mi cama y le grite a mi almohada. ¿Qué no sabe escuchar? ¿Qué no vale mi voz? ¿No existo? Inicie a llorar de la rabia, me da rabia que me haga esto... A mi, a la "niña de sus ojos".
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No.
Fiksi RemajaElla era infeliz, él quería verla feliz. Ella no sabia que hacer, él sabia que podía hacer. Ella necesitaba que la escucharan, él la escucho. Ella quería un cambio, él la cambio. Ella a estado toda una vida sometida, se olvido de vivir, se olvido...