Capítulo 3

773 65 4
                                    

    "6:40 a.m" Marcaba el inservible despertador que tenía a mi lado, debía levantarme y hacer mis cosas rápido o llegaría tarde, ya que tenía unos malditos veinte minutos de retraso. Estaba por levantarme cuando vislumbré una figura moverse al otro lado de la habitación, así que intenté quedarme lo más quieta que pude, fingiendo que seguía dormida.

—Ni lo intentes, ya sé que despertaste —dijo la misteriosa figura, pero algo en su voz me sonaba familiar.

—¡¿Puedes decirme quién mierda eres, y qué carajos estás haciendo dentro de mi habitación?! —dije alzando el tono de mi voz.

—Vamos, Kelsey, hablaste conmigo anoche y no me recuerdas, me ofendes... por otro lado, me haz tenido esperando por 7 minutos

—Luke, pensé que no hablabas en serio anoche, pero ¿cómo diablos entraste?  

—Mira, no es tan difícil si ni siquiera cierras la ventana —me maldije a mi misma, cómo podría haberlo olvidado.

Me levanté de la cama y me dirigí al armario, de allí saqué unos jeans y un sweater y entré al baño sin siquiera dirigirle la palabra a Luke. 

—Preferiría que te quedaras con ese pijama, el rosa se te ve bien 

Sentí como los colores subían a mi cara... idiota. Comencé a cambiarme dentro del baño, el no iba a impedir que llegara termprano a la escuela. Además, era la única persona con la que podía hablar, debido a que Lindsey se encontraba en Miami por la "boda de un amigo de la familia", como si lo creyera.

—Idiota —murmuré mientras salía del baño

—Si quieres me voy y te las arreglas para ir a la escuela —dijo mirándome con una sarcástica sonrisa

—¿Y en qué momento de nuestra "conversación" te pedí que me llevaras? —rodé los ojos.

—En ninguno, pero Beau no puede llevarte y no luces muy feliz cuando subes al autobus

—Vale —dije sin detenerme a pensar en cuándo me había visto en el autobus, aunque tan vez yo no haya notado que estaba allí.

Y allí estaba yo, con Luke Brooks, en su Porsche negro, llorando a mares: ¿A caso se podía caer más bajo que eso? No. Pero qué más podía hacer. Y vaya coherencia la mía, le temía a Jai Brooks, lo odiaba y repudiaba con todo mi ser desde anoche, pero estaba sentada con su hermano contándole todo lo que había pasado, deberían darme un premio.  

A decir verdad, Luke no era un mal chico, solo algo siniestro. Parecía saber cada detalle de mi, pero yo no sabía nada de el, y eso me asustaba un poco, aunque a lo mejor solo estaba adivinando. Era demasiado raro, pero a la vez consiguó calmarme así que no le puse demasiada atención a eso. Para cuando quise darme cuenta ya estábamos en la escuela.

(...)

— ¿Podrías llevarme de vuelta a casa? —le dije a Luke, no había visto a Jai en todo el día, lo cual no me disgustaba, y Beau no me había siquiera dirigido la palabra y, sumado a las ojeras que tenía, mis ganas de hablarle fueron disminuyendo.

— Sabes, la gente también tiene una vida —dijo el, cortante.

— Está bien, gracias Luke, también te quiero —contesté dejando entrever una sonrisa sarcástica saliendo de mis labios. — Adiós.

Dicho esto, comencé el camino hacia mi casa mientras escuchaba una canción de Haim, esta era bastante movida así que debo de haber parecido un tanto extraña mientras bailaba en la calle. Pero vamos... ¿quién no ha echo eso?

Stalker. [Luke Brooks]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora