7mo capitulo "Egoismo"

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Una pelinegra y un albino se miraban intensamente luego de que este último golpeara a Azusa, tomará a Yukino y se la llevara con él a algún salón de la escuela, que para la suerte del albino estaba vacía. La chica por su parte aún estaba en shock por lo que había pasado y también estaba un poco molesta, Azusa no había hecho nada malo para que Subaru lo golpeara, y para más remate se la llevó sin darle tiempo siquiera de poder ver si el peliverde estaba bien. En serio estaba molesta el chico frente suyo parecía no percatarse porque era el que la miraba a ella molestó. Y ahora sabría porque.

-Se puede saber porque el maldito Mukami masoquista te mordió? O mejor aún porque demonios dejaste que te besara!! - grito furioso el peli blanco.
-Gomenasai Subaru-kun... pero eso no es de tu incumbencia... - murmuró la pelinegra apartando la mirada. El chico lentamente se acercó a ella a lo cual ella reaccionó y comenzó a retroceder chocando contra una de las mesas del salón. El albino quedó a tan sólo unos centímetros del cuerpo de la pelinegra y la miro intensamente.
-eres NUESTRA novia... No de ellos, se supone que si no quieres ellos no pueden beber tu sangre y menos tocarte o besarte...- finalizó Subaru buscando la mirada de la pelinegra.
-Te equivocas...- susurro yukino.
-porque?- pregunto de vuelta el vampiro.
-el señor sakamaki me dijo que lo dejaba a criterio mío si era novia de ellos o no... Y yo no tengo inconveniente que sea así... Sobre todo Azusa-kun que es bueno conmigo... El... Tu... Todos Ustedes son mi familia ahora... Y no dejaré que hayan diferencias entre ustedes...- finalizó yukino centrando su mirada determinada en el vampiro, esto dejo en shock al albino ya que nunca una novia había sido así con ellos. Para los ojos de todos ellos eran monstruos, pero para esta chica no era así, no sabía cómo explicarlo, pero esas palabras provocaron un sentimiento cálido en su pecho, algo que no sentía hace mucho. Miro a la chica por un buen rato y sin poder aguantarlo más cerro toda distancia entre sus cuerpos y la beso. Esto tomo por sorpresa a Yukino la cual aún seguía un poco molesta, por lo cual decidió no responder a el beso. El albino se dió cuenta de estoy se separó de ella mirandola con enojo nuevamente.

-te gusta el masoquista?- pregunto furioso apretando levemente los brazos de la pelinegra.
-que?... Porque preguntas eso?- murmuró Yukino nerviosa.
-responde!!! El te muerde y además te besa y tu no opones resistencia, en cambio yo lo hago y me esquivas?- el albino ya estaba perdiendo la paciencia.
- no!! ... No es eso subaru-kun... Es sólo que estoy molesta porque lo golpeaste... Sólo eso...- finalizó en un susurro la chica bajando la mirada.
- estas segura? Si me dices ahora que el te gusta te dejaré en paz y no te molestaré nunca más...- la pelinegra ante esto levanto la mirada y se encontró con la mirada melancólica que siempre cargaba Subaru. Esto logro calmar el enojo de la chica y la hizo sentir mal, en el fondo sabía que el chico era agresivo por las circunstancias de la vida.
-yo... Le tengo aprecio, confío en el y me siento cómoda con el... Pero no me gusta... Es muy pronto para decir que él o alguno de ustedes me guste... aunque no lo creas los estimó a todos por igual, aunque algunos sean más esquivos o no haya tenido mucho acercamiento con otros, aún asi yo siento que cada uno formará parte importante en mi vida... Al igual que tu subaru-kun...- dicho esto la chica acarició la mejilla del peli blanco y tomo una de las manos de el, logrando que este aflojara su agarre.

-Estas segura de todo esto? Luego no tendrás escapatoria de nosotros... si sigues por este camino serás nuestra para toda la eternidad... Es lo que quieres? - yukino quedó pensativa, si bien aún era joven y podría irse cuando quisiera del lado de los vampiros, pero por alguna razón sentia que este era su lugar... Junto a ellos.
-estoy segura... Ya se los dije una vez, quiero que ustedes sean mi familia...- término la pelinegra mirando al vampiro con determinación nuevamente.
-entonces prepárate, porque tomaremos todo de ti...-  dicho esto el chico tomo a la pelinegra y la sentó en una mesa y se escabullo entre sus piernas, acto seguido le descubrió su hombro y clavo sus colmillos. La chica pego un pequeño grito de dolor, el cual pasó inadvertido por el vampiro ya que estaba ensimismado bebiendo la sangre de la pelinegra.

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⏰ Última actualización: Dec 31, 2017 ⏰

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