Capítulo Diez

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Sehun no estaba de buen humor cuando regreso a la escena del crimen, por alguna tonta razón creía que concentrándose en su trabajo lograría ignorarlo todo.

No sabía si Luna había decidido investigar más sobre la muerte de su hermana no obstante tampoco se iba a quedar a averiguarlo, tan solo había decidido hacer su trabajo como si no supiera de la existencia de Luna y su relación con el caso.

Aunque el fingir que no sucedía nada, no significaba que no le ocasionará preocupación.

—¿Cuántos ChanYeol existirán en la misma ciudad? —Uno de los forenses le pregunta.

Sehun recuerda que no está solo en la habitación de la chica muerta y decide por fin dejar de lado sus pensamientos con respecto a Luna.

—No lo sé, ¿A qué caso viene esa pregunta? —no suena a algo que se relacione con el trabajo, así que Sehun no puede evitar preguntar.

—¿No lo viste? La chica que murió, dejo una carta dirigida a un ChanYeol. Pensamos que es una coincidencia extraña el que se llame igual que el forense Park —Sehun presta atención al tipo que dice esto.

Ahora que le pone un poco más de atención, Sehun se da cuenta que el forense que le habla es el mismo que le entregó el paquete de evidencia mientras discutía con Luna. Y Sehun aún no había revisado ese paquete por estar pensando en Luna y su intromisión en el caso.

Sin responder nada, va hasta la parte donde había dejado el paquete y lo abre con los guantes puestos para no dañar la evidencia. Bien, ese paquete traía envases iguales o al menos similares a los que se encontraron sobre la mesa de noche de la víctima, solo que a diferencia de los envases vacíos sobre esa mesa de noche, éstos estaban llenos y Sehun se atrevería a decir que sin usar. Era bastante conveniente encontrarlos sin uso para poder analizar los componentes que pudo haberse inyectado en la victima e incluso poder analizar las huellas digitales en los mismos envases y dar con el asesino en caso de que no fuera el novio.

Parecía que éste caso se resolvería bastante rápido.

Parecía.

El paquete además de tener la medicina, incluía una carta que podría ser a la que se refería el otro forense, y por el tipo de caligrafía utilizada, era demasiado bonita como para pertenecer al novio o incluso a un chico de modo que debía ser de la víctima. Como fuera, Sehun dejo de fijarse en ese tipo de detalles y leyó la carta.

[...]

—¿Estás bien, amigo? —el forense de antes se acerca a Sehun.

—¿Quién?, ¿Yo? —Sehun se da cuenta que ha permanecido mucho tiempo inmóvil y carraspea antes de intentar sonar normal. Supone que estar tanto tiempo pensativo hizo que llamara la atención del otro forense—. Sí, no es nada.

Pero el otro no está tan convencido de las palabras de Sehun.

—Es que luces demasiado pálido.

Cualquier otra persona también perdería los colores del rostro al descubrir que no es solo su amante la que tiene algún parentesco con la victima sino que ahora se le suma su amigo porque definitivamente esa carta era para el Chanyeol que Sehun conocía.

—Es que no he comido nada desde la mañana y ya tengo hambre. —miente.

—Si quieres yo llevo la evidencia al laboratorio y tú vas a comer algo. —el otro forense no sabe nada de lo que está pasando por la cabeza de Sehun y aparentemente cree la mentira.

Sehun no tiene la cabeza en el caso como para hacer ese trámite y decide aceptar el ofrecimiento del otro forense.

¿Cómo es que no se dio cuenta antes que Chanyeol conocía a la víctima? Si mal no recordaba, en el caso pasado vio a Chanyeol y Luna hablando de modo que era obvio que se conocían de antes. Cuando Sehun vio la foto familiar donde aparecía Luna, su furia nubló su razonamiento y no fue capaz de conectar la relación que Chanyeol tiene en este caso.

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⏰ Última actualización: Dec 17, 2017 ⏰

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