-Oh,Christmas tree,oh Christmas tree, why don't I know the stinking words. Ya dada da, ya dada da, nobody knows the stinking words.-Por detrás de ella, podía oír a Becky, su socia, riéndose. Se detuvo de colgar la guirnalda de hojas perennes sobre su chimenea.
- Oh, por favor. ¿Acaso te la sabes?
-No. Es por eso que no la canto.
Emma sacudió la cabeza, incapaz de ocultar su amplia sonrisa. chris le había dado a entender que tenía algo especial que quería compartir con ella, y no podía esperar para saber qué era.
-Dime de nuevo, ¿A qué hora cerramos?
-¡Emma!
-Becky sacudió la cabeza.
-Aún faltan dos días para la nochebuena.
-¿Cuál es tu punto?
- ¿No dijiste que chris te había insinuando algo especial para entonces?
- Sí.
-Entonces, ¿por qué estás tan histérica ahora?
-¡Vamos! chris y las sorpresas.
-Terminó de colgar la guirnalda
modificándola ligeramente antes de dar un paso atrás con asentimiento satisfecho.
- La última vez que me sorprendió, me encontré emparejada con él y contemplando pisos de gatitos. -Ladeó la cabeza, estudió la guirnalda, y la ajustó por última vez.
- Y debido al emparejamiento la sorpresa no será algo como, "Esa chica de ahí lleva
a mi amado niño", por lo que no puede ser malo, ¿cierto?
Becky se quedó en silencio.
Emma se volvió para mirar a su amiga, de repente preocupada.
- ¿Cierto?
Becky se encogió de hombros, bajando la cabeza.
- ¡Becks! -Ahora Emma estaba preocupada. Becky se veía desgarrada y
culpable como el infierno. - Él no puede decirme eso... ¿o sí?
- ¡Oh, no! No, por supuesto que no. -Dijo Becky, riendo de manera nerviosa .- De ninguna manera -Se escabulló hacia el cuarto de atrás
- ¡Necesito más espumillón!
Emma parpadeó. El terror se instaló en su estómago como una bola de plomo. Oh,no.
¿Con qué la sorprendería chris?*****
Chris se quedó mirando hacia la pequeña caja negra y sonrió.
-Esto debería ser suficiente.
-Gah, no me gusta configurar estas cosas. -Simon se levantó, estirando la
2 Cintas decorativas navideñas:espalda antes de sacudirse por completo.
-Pero valdrá mucho la pena una vez que esté terminado. -Adrian les entregó
el café, bebiendo de su taza humeante cuando cada hombre tuvo la suya .- Además, una vez que lo enchufes se verá genial.
- ¿Crees que a las chicas les gustará? -Simon se sentó en el escalón,
pasando sus manos alrededor de la taza. Hacía mucho frío.
-Más les vale. Chris levantó el en chufe.- ¿Listos?
-Listos.
-Enciéndelas.
ajustó los contactos.
Su casa se iluminó como un llamativo burdel. Luces rojas, verdes, azules y
blancas centellaron alegremente. Ciervos de mimbre, con sus entrañas encendidas,
movieron la cabeza de arriba abajo con mecánica precisión. Y un tipo de globo
inflable de nieve subió... llevando a un Santa que giraba y lanzaba papelillos, que se suponían era nieve. Incluso había comprado un niño Jesús que brillaba intensamente,
seguro en su pesebre de plástico.
-Seve.Hmm...
-Como si Rudolph hubiera vomitado sobre toda tu casa.
Chris fulminó con la mirada a Adrian. El hombre fue lo suficientemente
inteligente como para levantar las manos y retroceder.
-Gracias a Dios escogí luces blancas.- La cabeza de Simon se hundió en su
abrigo cuando una bola de nieve llegó volando hacia él.
-Cállate. Chris estudió su patio, con el ceño fruncido.- Tal vez se me fue
un poco de las manos.
-¿En qué momento pasa de "irse un poco de las manos" al "especial de luces
de Kmart
"? Porque creo que estamos ahí.
Chris se volvió hacia Simon y gruñó.
-Jódete.
-Emma podría ponerse celosa. -Simon movió sus pestañas hacia chris
ganándose otra bola de nieve.
-No tenemos tiempo para arreglarlo ahora. Todavía tenemos que decorar mi
casa y la de Adrian. Chris gruñó y se dirigió a su Durango
, preocupado por cómo reaccionaría su
Curana ante lo que le había hecho a su casa. Emma no era exactamente tímida acerca de dar a conocer su opinión. Entró en el coche, siguiendo a sus amigos hacia la casa de Simon.
Sólo esperaba que ella estuviera dispuesta a entender lo que le estaba tratando
de decir. Tal vez si quitara algo. Es el globo de nieve de seis pies de alto. Si quito eso,
debería estar bien.
Ahora a decorar la casa de Simon. Acarició la bolsa de luces de colores en el
asiento del pasajero. Luces blancas mi culo.
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EL ORNAMENTO (HISTORIAS NAVIDEÑA) SERIE HALLEPUMAS 3.5 (Terminada)©
General FictionTrees Relatos Cortos: Historia corta navideña de chris y Emma Historia corta navideña de Simon y Becky Historia corta navideña de Adrian y Sheri. Serie Hallepumas 1-Mi puma (terminada) 2-Dulces sueños (terminada) 3-Un gato de diferente color (termi...