Despues de mi madre me vender yo ingresé en un convento para que no viera hombres hasta casar me con el hijo del hombre que le tenia pago a mi madre para que su hijo me hiciera suya y años más tarde casar me con el.
Y los años fueran pasando y para vuestro espanto hasta me gustaba la vida del convento.Allí podia estudiar, ayudar a los necesitados y lo que a mi más me gustaba podria ser la madre que muchos niños deseaban tener y no tenian. Yo hacia todo por ellos y ellos hacian todo por mi. Eran niños encantadores que solo necesitaban de un poco de atención.
Hasta que un dia cuando yo cumpli mis 17 años mi madre me vino a buscar. Habia llegado la hora de casar me con el hombre que me comprara hace muchos años. Y por eso tuve que despedir me de ellos.Fue lo más dificil que he hecho jamás. Me acuerdo que uno de ellos me dijo:
NIÑO- Vuelve mami nosotros te vamos a echar mucho de menos.
YO- Volvere hijos. Y siempre que me echaren de menos canten nuestras canciones y se sentirán mejor.
En ese instante una lagrima cayó en su rosto y senti que estaba abandonando mis propios hijos.