Bajo tu piel (PAUSADA)

UNO: El desconocido

Las parpadeantes luces de color azul y rojo y el sonido de la sirena del coche de policía que me persigue por las calles de la ciudad hace que me empiecen a pitar los oídos.

Mientras intento no caerme,
escucho la respiración agitada del chico moreno que corre a mi lado, al que conozco desde hace poco más de una hora.

Si mi madre supiese que ahora mismo estoy huyendo de la policía con un desconocido en vez de estar durmiendo tranquilamente en casa de Val como le había dicho, le daría un infarto.

De hecho, hace ya una hora que Val y yo tendríamos que estar en casa con nuestros pijamas puestos... y sin embargo, ella no sé dónde está y yo estoy huyendo de la policía con un chico al que no conozco...

¿Qué cómo he llegado hasta aquí?

Será mejor que empiece por el principio...

DOS HORAS ANTES:

Mensaje de Val a las 19:15

》En cinco minutos estoy en tu casa.
》Mueve tu culo gordo y vístete.

Mensaje de Maddie a las 19:15

》 No me encuentro bien. Creo que no voy a ir.

Mensaje de Val a las 19:16

》 NO. NO. NO
》 NO ME JODAS, MADDIE
》 YA LO HEMOS HABLADO, TÚ Y YO NOS VAMOS DE FIESTA.
》 JODER. ES EL ÚLTIMO DÍA DE VERANO, MADDIE, NO PENSARÁS QUE VOY A DEJAR QUE TE QUEDES EN CASA????

Puse los ojos en blanco al leer los histéricos mensajes de mi mejor amiga y medité un segundo mis opciones; por una parte me apetecía quedarme en casa viendo alguna serie en Netflix, con mi nutella, mi mantita y cotilleando las fotos de instagram de la gente del instituto a la que no había visto en todo el verano... pero era el último día antes de empezar último curso y decirle adiós a mi libertad para encerrarme los nueve meses que duraría el curso en mi habitación a estudiar... así que pensándolo bien, no era tan mala idea lo de la fiesta.

Además, mi hermano había invitado a sus amigos aprovechando que papá y mamá iban a pasar fuera toda la semana y no me apetecía pasar la noche rodeada de adolescentes de último curso con las hormonas revolucionadas... porque a pesar de que éramos mellizos, Axel y yo no compartíamos demasiados gustos, y mucho menos en cuanto al tema de amistades.

Mensaje de Maddie a las 19:18

》 Tranquila, fiera.
》 Está bien, iré.

Dos minutos después escuché el familiar sonido de un cláxon desde la calle y corrí escaleras abajo mientras me recogía el pelo en una trenza mal-hecha.

- ¡No me esperes despierto!- le grité a mi hermano, que estaba tirado en el sofá comiendo algo mientras esperaba a sus estúpidos amigos, antes de cerrar la puerta.

Mientras caminaba hacia el exterior, pude oír la respuesta de Axel:

- ¡No pensaba hacerlo!

A unos metros de mí divisé el Volvo granate de Val, que estaba apoyada en él mirándome con una amplia sonrisa en la boca y jugueteando con uno de sus mechones rubios.

- Llegas tarde- me dice aún sin dejar de sonreír.

- Mi culo gordo no me permite ir más deprisa, lo siento- digo sarcásticamente utilizando el insuto hacia mi trasero que ella usaba contra mí habitualmente.

Lo más gracioso de todo es que mi culo era de todo menos gordo... podemos decir que era incluso inexistente.

Entré en el coche dejándome caer en el asiento del copiloto y solté un largo suspiro.