MAMIHLAPINATAPAI [BNHA] [Aizawa Shouta x Lectora]

Capítulo 4

DÉPAYSEMENT 

Cuando sientes extraño en un lugar que no es tu casa

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Ya van dos días desde que vive con el, tuvo que ir un par de veces a su departamento para buscar otras pertenencias –ropa y mas calzado que se olvidó en el momento– y la billetera, algo muy importante. Ahora mismo, está con una taza de café cargado, apoyada sobre la mesada de la cocina. 

Puede escuchar el sonido de la ducha de fondo, y el tic tac del reloj que está en la pared. Son las ocho de la mañana, es cierto que está acostumbrada a despertarse a todas horas debido a su trabajo como Pro Héroe, sin embargo, hacerlo al lado de Aizawa es otra cosa. Iba a acompañarlo a la UA, y prácticamente a todos lados porque no podía estar lejos de su lado. 

Del bolsillo de su chamarra saco un pastillero, que llevó directamente a su boca, tragando dos pastillas blancas con café. Mala decisión la verdad, pero ya hizo esto muchas veces como para saber que no iba a matarla. Tiene un tazón de arroz en sus manos, pan tostado, un poco de jugo y bacon que acababa de hacer. 

Aizawa sabe cocinar lo mínimo, lo mismo con ella. Así que las últimas noches cenaron comida que pidieron por delivery. 

(T/n) está completamente vestida, sin el traje de héroe. Lo cual se le hace muy extraño. Acostumbraba a vestirse como si fuera alguna clase de agente de Marvel las 24/7, y ahora vestirse como civil se siente extraño. 

El azabache apareció minutos después, el pelo negro envuelto en una toalla y con un aroma a colonia masculina que tapaba perfectamente el olor a bacon. Lleva puesto su traje, junto con la mirada más adormilada que le vio en toda su vida. Las ojeras negras resaltan de su piel y por unos segundos se vio preocupada por su salud. ¿Hace cuánto que no duerme adecuadamente? 

Aizawa llevo pan tostado con bacon a su boca, igualmente apoyado sobre la mesada, mirando fijamente la ventana. (T/n) se rasco la muñeca donde tiene el rastreador y enseguida recibió un choque eléctrico que la despertó enseguida. 

—Solo me rasque la muñeca, maldito aparato. —¿será que si lo miraba fijamente podría controlarlo? Uh, aunque es una mala idea considerando su estado crítico de salud. 

—Luego le bajaré la intensidad. —lo escuchó comentar, masticando los últimos pedazos de comida— Y eso que esta al minimo.

—¿Esto es mínimo? —señaló su pelo encrespado— Estuve veinte minutos intentando peinarme. 

—Espero que lo reduzcas a cinco, porque ya nos iremos. 

La escucho gruñir, a la vez que la veía irse en dirección al baño, murmurando maldiciones por lo bajo. Aizawa no recordaba cuándo fue la última vez que compartió el desayuno con alguien, probablemente hace muchos años. Al tener la edad suficiente y dinero, busco un departamento lo más rápido posible porque ya quería independizarse. 

Y sus desayunos siempre eran en la UA, café y con mucha suerte un par de Donuts. 

Sus ojos ónix cayeron en los platos que (T/n) lleno con bacon y la jarra con jugo, los dos tazones de arroz y el pan tostado. Este es el primer desayuno decente en mucho tiempo.