Capitulo 16

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El verdadero significado de la música

Habían pasado ya una semana desde el problema de Hinata, ella parecía tranquila y estable; mientras que su padre no la había buscado, eso significaba que habría tranquilidad por un tiempo, pero no sabia cuanto. Se había mudado con el durante una temporada, su madre no se opuso tras saber el motivo de todo ello; mientras que su padre se molesto por todo aquello y no precisamente por la llegada de Hinata, si no por el trato que le dio su padre a el. Fugaku había prometido hacer algo al respecto. 

Hinata se adapto a nuestras costumbres y horarios; mi madre por otra parte esta que rebozando de felicidad por el simple hecho de tener a una mujer a su lado; mi hermano la trataba como una hermana y mi padre como una hija mas. A Hinata se le veía tranquila, en paz, disfrutando por un momento de una familia "estable".

Las clases, iban normales, salvo que ahora pertenecía a un grupo diferente, al grupo de los "genios"; su padre le felicito sin saber sus verdaderas razones de estar en aquel grupo. Hinata estaba bien en sus calificaciones, tal parece que sabia apartar las cosas, no quería descuidar su carrera a causa de sus problemas; aunque a ella le hubiera gustado estudiar otro tipo de cosa.

Naruto, se había disculpado con Hinata y ahora eran amigos, aquello no le agrado en absoluto, pues sabia que su "escandaloso" amigo aun estaba enamorado de aquella mujer de ojos lunas, y que sabia que si el cometía el mas mínimo error el lo aprovecharía. Aunque habían vuelto a ser amigos, sin ningún resentimiento. Tanto Naruto como el tenían algo en Común, querían proteger a Hinata.

Hinata volvió a sus clases de Artes Marciales, el siempre le acompañaba y veía lo asombrosa que podía llegar a ser, tal pareciera que estaba bailando, sus pies eran ligeros y la mayoría de sus compañeros le tenían miedo, pues era capaz de derrumbarlos en menos de diez segundos; debía de admitir que no haría enojar a aquella mujer que parecía incapaz de lastimar a una mosca. 

Pero algo me preocupaba, Hinata ya no tocaba ningún instrumento, y cuando trataba de tocar el tema ella lo evadía o simplemente callaba; ella ya ni si quiera intentaba tocar algún instrumento; sabia a la perfección lo inestable que estaban sus manos y que le costaba controlarlas. 

El estaba tumbado en mi cama, era media noche y su cabeza divagaba en todo lo que había pasado en esa semana, Hinata supo llevar bien el problema, no dejo que le afectara a su vida, o bueno al menos eso aparentaba. Entonces me pare de mi cama y me senté, vi fijamente la puerta... Seguía pensando en todo eso y si Hinata realmente se encontraba "Bien". Cuando vio pasar una silueta enfrente de su puerta, reconocía aquella silueta y sabia que era la de Hinata; la siguió. 

Llegaron al cuarto de música donde anteriormente tocaba su padre y que algunas veces llego a tocar ahí con Hinata, entonces decidió hacer lo que hizo cuando la conoció, se sentó a lado de la puerta esperando a que Hinata tocara algo....Toco algunas teclas, pero... algo le hacia falta, no tocaba como siempre lo hacia... Pareciera que su música reflejaba... Miedo y dolor.  Escucho sollozos... Entonces me pare y entre al cuarto, sorprendiendo a Hinata

- Sasuke - dijo levemente tratando de ocultar sus lagrimas 

- Ni se te ocurra - le dije acercándome a ella y sentándome en el banco - no ocultes lo que sientes

Hubo silencio...un silencio abrumador, entonces decidí tocar una canción que había practicado en las pocas vacaciones que nos dieron, no era complicada pero era delicada... Como ella

Sus maravillosas manosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora