CAPÍTULO 19

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-Que pasó mi bebé- y si Mia estaba levantada
-Jimin....- y si _________ se levanto igúal fracazo para el y la sorpresa que planiaba
- Jimin - habló otra vez - estas con Mia
- Si amor, ella ya se levanto tu sigue durmiendo
- Hablas enserio?
Ambos hablaban de diferentes cuarto lo cual se hacia muy comico
- Si has estado muy cansada por todo mejor duerme yo me quedare con Mia
- Esta bien - ella volvio a dormir
Bueno la sorpresa no se habia echado a perder aún. Saco a Mia de su camita
- la niña más hermosa igúal a su mamá.
Se dirigio hacia abajo donde puso a Mia en su sillita y encendio la tele tenia que esperar a que la comida osea el desayuno llegara.

**********
El día más esperado para ________ habia llegado no tenía por qué, pero estaba nerviosa. A tan solo horas de su boda y no sabía como iba a ser. Jimin no habia estado desde la mañana.
Empleadas que contrataron iban y venían por toda la casa, gente que arreglaba el jardín, personas que colocaban adornos. Los padres de ambos se la pasaban en casa, cuidando detalle por detalle, dando ordenes sin cesar, intentando que todo fuera lo más perfecto posible.
Me senté en la cama y estiré mis brazos. Tres mujeres me miraban intensamente
-No me vean de esa manera.-dije. Las tres voltearon a la vez y se dedicaron a mirar la pared.- ¿Qué hacen?
-Privacidad.-dijo una de ellas.
-Okey.-dije entendiendo que padecían de algún problema mental.- ¿Puedo darme una ducha?-pregunté.
-Claro que si. Iremos a preparar su desayuno.-dijo una de ellas y codeó a las demás para salir con rapidez del cuatro.- No se demore mucho.-gritó desde afuera.

Hice una mueca torcida y me puse de pie. Iba a obedecer. Tomé una toalla y entré a la ducha. Tan pronto como estuve lista, me coloque la ropa y bajé mientras me revolvía el cabello. Las tres me miraron y luego desviaron la mirada. Eran raras.
-He aquí, su jugo de naranja y su manzana.
-¿Por qué debo desayunar esta escasez?-pregunté enarcando una ceja.
-Porque debe desayunar liviano.-sonrió una.
-Oh, claro, es que puedo engordar en tan solo seis horas.
-Eso es muy poco tiempo y en veinte minutos debemos estar en la peluquería. Por favor, apúrese.-dijo una impaciente castaña a mi lado.
Comencé a desayunar lo poco que me habían servido. Y como era de esperarse, cinco minutos después acabe, debido a que no tenía mucho que comer o tomar.
-Ya, vamos.-dijo con emoción la castaña.
Las cuatro, juntas, subimos a un automóvil negro que estaba aparcado al frente de la casa. En menos de quince minutos llegamos a la peluquería, que para mi asombro, no había casi nadie.

-Discúlpenos, sentimos llegar tarde.-dijo una de ellas.
-No hay problema, ¿Cuál es la novia?-preguntó la mujer con múltiples broches en el cabello.
-Yo.-dije levantando mi mano levemente.
Antes de poder seguir hablando, la mujer de broches, me llevó hasta donde se suponía, lavarían mi cabello. Y aunque insistí varias veces con que me acababa de duchar y no necesitaba lavar mi cabello nuevamente, ella lo lavó como si fuera más delicado que la porcelana.
-¿Te peino a mi manera?-preguntó.
-No, tiene que ser un buen peinado que quede para el vestido que ha elegido ella.-opinó una de mis “damas de compañía”, mientras leía una revista de moda.
-Descríbanme el vestido, por favor.-dijo con felicidad la pelirroja mientras secaba mi cabello con un enorme secador.
La chica que se hacía llamar “Louise”, describió mi vestido a la perfección. Lo cierto era que me sonaba extraño porque ella nunca lo había visto, o eso creía yo hasta hace diez segundos.
Luego de que la pelirroja con distribuidas pecas por el rostro terminara de secar y planchar mi cabello, me llevaron a una especie de salón de belleza.
-Vamos a hacer un maquillaje algo sutil y delicado, solo resaltaremos las partes más bellas de mi rostro.
-Es bella.-opinó una de las chicas del salón de belleza.- Vas a tener que resaltar todo.-sonrió luego. Le devolví el gesto.
-Gracias.
-No hay de que, linda.-me dijo y volteó para abrir algunos cajones y sacar algunas cremas.
-Ahora, solo déjate llevar por la magia del maquillaje que solo Bárbara y yo, sabemos hacer.-sonrió.

Mi Vida, Eres tú! - (P Jimin & Tn) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora