Bad Reputation.+18 (Pride! Ed/ RoyEd)

7.-Teen Idle.

—Conozco una casa que están rentando lejos de aquí. Sigueme— Roy toma la mano de Pride mientras no dejaban de correr. Ambos sabían que las patrullas les seguían pero por suerte los únicos que conocían su rostro eran los del Bar y no los policías, eso lo tenían a su favor.

Luego de correr uns kilómetros llegaron a una casa alojada casi a las afueras de la ciudad. Era una casa construida a base de cemento y puertas de metal.

Roy toco un par de veces la puerta de — Irónicamente — acero y una mujer les abrió.

—Madame. —Mustang sonríe relajado y la mujer igual. Les abre la puerta de par en par. — Quiero rentar la casa.

—Por supuesto. Tienes suerte, ya me iba. — Les dejó pasar. Una vez la puerta de acero fue cerrada tras ellos, Roy fue a entregar el dinero que la mujer le pidió y firmó unos documentos para obtener al cien por ciento la propiedad.

Apenas Roy firmó aceptando todos los lineamientos la casa fue suya y Madame le entregó las llaves a Roy.

— Tenias una buena casa. ¿Qué te hizo venir acá? —Pregunta la señora. Roy solo se hunde de hombros dándole una sornisa.

—Solo son cosas de la vida. — Dijo. Roy no tenía la más minima intención de hablar sus asuntos personales con ella, era algo que se iba a guardar con Pride.

—Su casa esta situada en la planta baja, hay un ascensor a la derecha. Gracias por comprar— Dijo Madame antes de salir por aquella puerta enorme de acero. Una vez solos; Pride y Roy fueron al ascensor que estaba a un lado de la sala principal y fueron a su nueva casa. Más bien era un departamento por el tamaño tan pequeño que tenía.

Ambos se encontraron en la planta baja. Totalmente protegidos; Paredes de acero por fuera y ladrillo por dentro. Después una pequeña sala, un pasillo al fondo y en él estaban dos habitaciones. Al lado de la sala, una cocina,y de la cocina, un baño.

Pride se adelanta a dejar su mochila en la pequeña mesa de centro que había ahí. Era obvio que deberían ir de compras desde cero.

—¿por qué hiciste eso, Pride? — Roy se atrevió a preguntar. Se hace un silencio, Pride no responde. Se toma dos minutos para hacerlo.

El rubio toma una bocoanada de aire. Le estaba dando la espalda a Mustang. No encontraba las palabras ni el valor para decirlas. Era algo que había estado pensando técnicamente desde que llegó ese día al bar,sino, que desde antes.

Pride apoyó sus manos en la mesa. Se dedicó a no ver a Roy, a pesar de sentir como este se acercaba. Ya no pudo contenerse más, sentía la presión en su pecho y un dolor en la garganta. ¿Queria llorar? ¿se había contenido demasiado?

—¡Es que no sé que tienes! Hay algo en ti que me hace querer protegerte, querer que sigas con vida, querer que sigas a mi lado...—Sigue sin mirarlo. Explotó, su voz podría quebrarse. Fue la primer muestra de afecto real que le daba al azabache.

Lo único que Pride le había transmitido al Coronel era; Indiferencia, a veces enojo. Pero siempre su mirada era inexpresiva al igual que el tono de sus palabras.

Pero ahora.. Su voz iba a quebrarse, se escuchaba como quería empezar a sollozar. El de ojos negros intentó acercarse y tomar el hombro del rubio pero cuando estuvo lo suficientemente cerca se dio cuenta de eque temblaba.

Había estado reteniendo esos pensamientos y esos sentimientos por mucho tiempo y ahora los estaba liberando...

—Yo...Yo.. Yo sé que no soy como él pero...Puedo intentar. — Pride se da la vuelta y Mustang queda en shock al ver varias lágrimas descender por su mejilla.