Ella no quiere herirlo

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  (Y él piensa que es demasiado tarde) 

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 —Raven... ¿Cuál crees que es el mejor remedio para un corazón roto?

Ella se veía más curiosa que molesta, estaba interrumpiéndola antes de que iniciará su sesión de meditación, sin embargo, ella cerró sus ojos y levitó. Después de meditar ella era más receptiva a las emociones de los demás.

— ¿Tienes el corazón roto?— esa no era la clase de respuesta que esperaba de ella—. Si, lo tienes.

Lo afirmo con una seguridad absoluta.

—No, en realidad...

— ¿Quieres hablar de ello?

—Mamá dice que lo mejor para un corazón roto es una taza de chocolate caliente, tan sólo tenía curiosidad acerca de lo que tu pensabas.

—Soy una empática Mark, no me puedes mentir, la tristeza esta alrededor de ti. Pero si me lo preguntas, no hay mejor cosa que aceptar las cosas tal y como están.

—Eso es lo que tú hiciste— susurró, pero al parecer sus oídos estaban más atentos a todo, quizás por ser el único sentido que le quedaban disponible.

Raven frunció el ceño, aún con los ojos cerrados.

— ¿A qué te refieres?

Mark no tuvo el valor de confesarle que había escuchado dos de sus conversaciones privadas a escondidas y lo sabía todo.

—Nada.

.o.O.o.

Estaba tan desesperado por hablar con alguien acerca de todo lo que tenía en su interior, que no tuvo más remedio que acudir a su mayor amigo: Tony.

— ¡¿Estás enamorado de quién?!

—Shhhh...— de inmediato se fijo si había alguien a la redonda, buscando cualquier indicio de un animal verde—, si te estoy contando esto a ti es porque se supone que eres más discreto que Mari y Nicole. No me armes un escandalo.

—Ya, ya— el joven que desempeñaba entre los Jóvenes Titanes el papel de tecnopata frunció el ceño—, ¿pero como acabaste así? Entiendo que te pueda parecer bonita Raven, lo es. Pero Mark, podría ser nuestra madre.

—Hablas como si se viera como una anciana.

—Se sigue viendo joven, pero tiene la edad del tío Richard.

—No le digas tío Richard.

Sabían muy bien los nombres reales de los adultos, pero para Mark era una especie de tabú decirlos, el primer Robin le dejo algo traumado respecto a las posibilidades en caso de que alguien se entere de sus verdaderas identidades. En Tony no había funcionado.

—Cómo sea, pero dime ¿Cuál es el problema? Aparte del hecho de que te enamoraste de una mujer mucho mayor que tu. Supongo que debías darles algún problema a tus padres y este es el que escogiste.

—Basta con esto— se sonrojo—, me enamore de ella desde antes de conocerla— Tony levantó una ceja, obviamente exigiendo una explicación—: ¿Recuerdas el tiempo en que iba al cuarto prohibido?

—La habitación de Raven.

—Encontré su diario, lo leí y me enamore de ella así. Ahora que lo digo en voz alta suena algo tonto.

— ¿Seguías con esa manía de leer diarios? Mark, eres un chismoso.

—Ya hombre— nunca le gusto que Tony no tuviera inconveniente con decir verdades— te voy a decir el problema: Ella esta enamorada de otro hombre.

EllaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora