¿Internado?

Capítulo 06.

Creo que mi lista de música está totalmente en mi contra, tres canciones después de haber despegado comenzó "Vuelo hacia el olvido", es una canción que me encanta. Pero ciertamente, no en este momento. Diganme masoquista, pero no la quité. Apoyé mi cabeza en la ventanilla, como en las típicas películas.
Es hermoso viajar por la noche, las pequeñas luces a lo lejos le dan un aspecto encantador a la escena.
Decidí disfrutar del viaje, de nada serviría estar 10 horas en un avión quejándome o llorando, aunque no me desagrada la idea de quejarme por todo.
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Son las 23:30, ya he escuchado todas las canciones que tengo descargadas, eh dormido un rato y le he hecho la vida imposible a mi compañero de asiento.
-Vamos, tampoco puede ser tan malo.
-¿Perdón? Me sacaron de mi vida y eso te parece poco.
-Bueno. Que como castigo te den un viaje en avión gratis, y te manden a 10 horas de cualquier miembro de tu familia, no me parece tan malo.
-Bueno, quizás desde ese punto de vista no. Pero cambiando de tema ¿Tú porque viajas? No quiero hablar tanto de mi.
-Es un viaje de estudio, parecido al tuyo. Me hubiese gustado que fuera como en las películas "Viajo por placer". -Nos reímos los dos.

-Ah, interesante.

-Si, bastante ¿Quieres ver alguna película?
-Sí, claro.
Cada uno conectó los auriculares a las pantallas de los asientos, elegimos la película "Hazlo como hombre". Creo que es mexicana.
****
Llevamos 5 horas en el avión, ya quiero mover mis piernas. Me levanté para ir al baño, y medio avión estaba dormido.
Cuando volví Nahuel también lo estaba. Se me complicó un poco para pasar, ya que tengo que pasar por arriba de él. Pasé una pierna para el otro lado y se me enganchó la pollera, intenté sinchar pero caí sentada arriba de él.
-Bueno, si querías hacer algo no tenías que esperar a que me durmiera. -Dijo mientras abría los ojos, con la voz más ronca del mundo.
-Cerrá la boca y dejame pasar, idiota.
Se rió y me senté, las próximas tres horas las pasé dormida. Al despertarme estaba apoyada en el hombro de Nahuel, y él estaba apoyado en mi cabeza.
Hubo una pequeña corriente de aire y el avión se sacudió un poco.
Nahuel se despertó de golpe y me tomó de la mano asustado.
-Soy muy joven para morir. -Dijo rápidamente. Unos cuantos pasajeros que llegaron a escucharlo y yo largamos una carcajada.
-Tranquilo, morirás viejo. -Le dije entre risas.
-Que alivio. -Dijo con sarcasmo, acompañando el comentario con un suspiro.
Seguía sin soltar mi mano, solo que ahora ya no lo hacía con miedo. Ambos sostuvimos las miradas, fijas en nuestros ojos, diciendonos todo, y al mismo tiempo nada. Ahora que lo pienso, es guapo. Su pelo atrapado en la lana de su gorro, sus perfectas y largas pestañas negras, sus lindos labios rosa, que parecen tan suaves, resaltan en su linda piel blanca... VIVIANA, PARA.
El resto del viaje transcurrió así, risa tras risa, anécdotas, chistes.
-Damas y caballeros, les pedimos que se abrochen los cinturones, aterrizaremos en un promedio de 15 minutos.
-Ay. Eh escuchado que los aterrizajes son la peor parte del vuelo ¿Y si nos caemos? ¿Y si nos morimos? Yo no quiero morir, tengo toda una vida por delante.
-Basta. No te vas a morir. Solo vamos a aterrizar. -Le sujete la mano. -¿Qué? Así no tendrás miedo. -Sonrió y me la apretó.
Aterrizamos rapidísimo, en menos de lo que canta un gallo ya estábamos en la primer planta del aeropuerto.
-Bueno. Nuevamente, gracias por el maravilloso viaje, y mucho gusto Ana.
-Igualmente ¿Por que de todos los apodos elegiste Ana? Es el peor.
-Lo siento, Ana. -Lo fulminé con la mirada.- ¿Me pasas tu número? Así seguimos en contacto.
-Claro, dame tu celular. -Me lo dio, fui a contactos y agregué mi número. Me agendé como "Vi" y un corazón.
-Yo te quería agendar como Ana.-Dijo haciendo pucherito.
-No iba a permitir eso.-Le respondí tocandole los cachetes como una abuela a sus nietos.
-No hagas eso.
-Te ves tierno.
-Ahí viene un taxi ¿Subes?
-Si, claro ¿Tú no presisas uno?
-No, me vienen a buscar.
-Bueno. Adiós. -Le di un beso en la mejilla y paré a el taxi, Nahuel me abrió la puerta como todo un caballero, y ayudó al taxista a subir mi valija al maletero.
Luego de que arrancaramos miré hacia atrás y se estaba subiendo a un taxi, mentiroso...
Le di la dirección del internado al taxista, me dijo que el viaje era de media hora, pero por el transito pesado ibamos a demorar.
A los 15 minutos me llegó un Whatsapp.
*Chat*
Familia:
Pedro-Vi. Avisanos cuando llegues.
Mel-Lo de Pedro.
Thommy-De seguro ya se olvidó de nosotros, debe de estar de fiesta en Londres.
Mel-Callate Thommy, Vi ahora es una nena bien. Está en un internado:c
Pude notar el sarcasmo en ese mensaje.
Yo-YA SÉ QUE NO PUEDEN VIVIR SIN MI, ESTOY VIVA.
Yo-Aunque no sé por cuanto tiempo más...
Pedro-Aquí falta parte de la familia, agreguen a Carmen (Mamá) y a Martin (Papá).
Mel-Deja de drogarte Pedro.
Thommy-¿Y esos quienes son?
Yo-Ya dejen el sarcasmo, lo único que quiero es dormir.
Thommy-Eso es justamente lo que no te dejan hacer en donde vas c:
Yo-Thommy.
Thommy- ¿Qué?
Yo-Vete a la mierda.
Thommy- Yo sé que me amas.
*Fuera del chat*

Me llegó otro mensaje, de un número desconocido, pero supe identificarlo.

*Chat*
Desconocido-Hola, Ana.
Yo-Hola, compañero de asiento.
Desconocido-¿Ya has llegado?
Yo-No, el transito está pesado.
Desconocido-Verdad.
Yo-Mentiroso.
Desconocido- ¿Y ahora que hice?
Yo- "Me vienen a buscar".
Yo- Tomaste un taxi.
Desconocido-Bueno.
Desconocido-Tomemos en cuenta que el taxi me pasó a buscar.
Yo- :)
Desconocido- ¿Como se supone que debo de interpretar esa carita?
Desconocido-Ok, visto.
Desconocido-¿Me agendaste?
Desconocido- Quiero ver.

Le envié una captura de pantalla.

Amistad 1 en Londres-Ese nombre me hace sentir importante.
Yo-Estás en los contactos de mi celular, ya con eso sientete importante.
Amistad 1 en Londres-Bueno.
Amistad 1 en Londres-Me siento más importante aún.
Yo-Estoy por llegar, no sé si me dejarán usar el celular.
Yo-Así que me despido nuevamente.
Amistad 1 en Londres-Bueno :c
Amistad 1 en Londres-Adiós, chica internada.
Yo-Adiós, compañero de asiento.

Bloqueé mi celular, dimos unas vueltas en el auto. Y de estar en el medio de la ciudad, pasamos al medio del campo ¿Habrá señal aquí?

Fuimos por una entrada de piedras, el pasto está muy verde, corto y cuidado.

La entrada lleva a una gran mansión, en serio GRAN. Esto es muy distinto a las fotos de google, es todo mucho más hermoso. Frenamos justo en frente a la puerta de entrada.
El taxista bajó y colocó mi maleta en el suelo, le pagué y se fue.
Y se fue.
Se fue.
Mi única oportunidad de vivir.
Se fue.