Te Necesito (Spencer Reid y tu) /Cancelada temporalmente/

30. Persecución (Maratón 4/?)

Cuando me fui del aeropuerto empece a conducir a un edificio abandonado donde había quedado en encontrarme con unas personas, al llegar entre a ese lugar y de inmediato varias armas me apuntaron, levante mis manos para demostrar que no iba hacer nada malo y hable 

  - Anata no buki o sageru, watashi wa Satō no yūjindesu (Bajen sus armas, soy la amiga de Sato) 

Uno de ellos se me acerco y levanto un poco mi camisa  dejando la parte baja de mi espalda al descubierto 

- Sore wa kanojodesu (Es ella) - dijo y todos bajaron sus armas 

- Aquí esta lo que le pidió al señor Sato - dijo el que parecía el líder dejando la maleta frente a mi

- Gracias - la tome - Díganle a Sato que gracias 

Abrí la puerta principal para salir cuando escuche los disparos, los cristales se rompieron, como un reflejo cubrí mi cabeza con mis brazos mientras regresaba al edificio 

- Mierda - dije y seguí escuchando disparos, los yakuza estaban disparando a nuestros atacantes 

- Anata wa daijōbudesuka? (¿Estas bien?) - pregunto el líder del grupo mientras se acercaba 

- Hai (si) - respondí sacudiendo mi cabeza para quitarme los trozos de vidrios rotos 

Cuando levante mi vista vi que me extendía un chaleco antibalas, me lo puse, agarre la mochila y saque una pistola, les di una señal y ellos abrieron la puerta, empece a correr mientras disparaba, al llegar a mi auto empece a conducir, el auto era brindado pero luego de unos minutos de conducción ya no se escuchaban disparos. Iba de camino a la CIA cuando mi teléfono sonó, no podía ver el numero pero algo me decía que debía contestar 

- ¿Hola?

- Hola Sam - esa voz, era Naia

- ¿Que quieren? 

- Queremos a nuestra hermana 

- No, ustedes dos están locas, pero si la quieres, debo estar muerta para que ustedes la tengan 

- Entonces... ten cuidado - dijo y colgó 

Me quede pensando en sus palabras, pero me vi interrumpida por un auto negro que apareció de la nada frente a mi, gire el volante bruscamente y puse el freno, mire el auto y este bajo el vidrio dejando ver a las gemelas con una sonrisa. Empece a conducir lo mas rápido que pude, ellas me estaban siguiendo con intenciones de hacerme chocar, a lo lejos se podía escuchar las sirenas de la policía, cuando tuve la oportunidad, frene repentinamente haciendo que ellas giraran el volante y se estrellaran con un poste, me baje de mi auto y me acerque al de ellas, abrí la puerta y les apunte, no había nadie, me di la vuelta y una bala me dio en el pecho, sentí un poco de dolor pero no era nada grave, gracias al chaleco 

- ¡Maia! ¡Naia! - grite y apunte con mi arma, no podía ir a mi auto ya que ellas podrían estar hay

Empece a correr, debía alejarme de ellas, para perderles iba a dirigirme a un parque publico pero me detuve, la policía estaba hay, decidí que debía correr por otro lugar aunque este estaba vació 

- ¡Te tengo maldita! - dijo Maia mientras se me acercaba 

Ella me podría atrapar y en ese momento recordé en donde estaba pasando, era un puente, tome velocidad y me lance de este cayendo en el agua, unos disparos pasaron cerca de mi pero luego desaparecieron, salí del agua, varios policía me estaban apuntando 

- ¡Ponga las manos donde podamos verlas! - dijo y yo levante mis manos 

Me llevaron a la estación de policía, empezaron a preguntar porque tenia una maleta llena de armas, que intenciones tenia yo, con quienes estaban, pero yo me limite a responder, decidí hacer mi llamada contactando a Olivia, espere unos minutos y me dieron libertad, agarre el bolso que tenia las armas y las llaves de mi auto, conduje a la CIA y decidí que primero debía quitarme la ropa húmeda, entre a mi oficina y vi a alguien en ese lugar, era Spencer el cual me pregunto que paso así que se lo explique 

- ¿Estas bien? ¿segura que no estas lastimada? - pregunto preocupado 

- Si, solo tendré un pequeño morado - dije recordando la bala que me había dado en en pecho - debo quitarme esto - abrí uno de mis cajones y saque algo de ropa

Me cambie los pantalones por un short de mezclilla, una camisa sin mangas de color blanco y un suéter azul azul que me llegaba a la mitad del muslo, me cambie los zapatos por unos tenis azules y vi que Spencer me miraba detenidamente 

- No sabia que tenias un tatuaje - soltó de repente y yo sonreí 

- Spencer, me has visto sin ropa y me vas a decir que nunca lo viste - él negó y me pareció demasiado tierno 

- ¿Por qué lo tienes? 

- Por Liv, ella es la hija del líder de la familia yakuza, Yamaguchi-gumi, mis padres eran amigos de los padres de Olivia, ellos siempre han querido a mi familia y nosotros los queremos a ella, yo me uní a ellos hace 4 años, el señor Sato sabia que yo y Olivia trabajos para la CIA así que no tenemos las tatuajes que tiene un miembro normal

- ¿La CIA sabe de esto? - yo asenti

- La Yakuza de divide en diferentes familias, algunas son enemigas y otras aliadas, nosotras damos información de las enemigas y bajamos el indice de influencia de nuestra familia aquí en Estados Unidos, la CIA nos recibe con esas condiciones, ademas saben que Olivia y yo no tenemos nada que ver con las actividades Yakuza aquí y aveces usamos a los Yamaguchi-gumi como refuerzo en operaciones de alto riesgo, pero esto queda para otro momento, ahora debemos dar la información 

Salimos de mi oficina y vi como toda la UAC no podía hablar ya que todos los ignoraba, respire profundo y grite 

- ¡Quiero orden y silencio! ¡Empezaremos una reunión importante y necesito la atención de todos ustedes! - grite mientras me acercaba a la UAC y todos los agentes d de la CIA se acomodaban y se quedaban calladas - Los niños, por favor, vayan a su piso, los demás, les diré que tenemos serios problemas - empezaron a murmuran entre ellos confundidos - Maia y Naia están locas... aunque eso ya lo teníamos claro - dije y ellos empezaron a reír - Vamos al grano, ellas van a intentar matarnos a Liv y a mi, pero vamos a recibir una pequeña ayuda - dije y señale a la UAC