Carta 2

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Odio que no contestes los mensajes. Estoy consiente de que tienes una vida, tienes más preocupaciones que el hecho de mantener una conversación con alguien tan poco interesante como una joven de quince años carente de experiencias; pero me muero de ganas de que escribas un corto texto que me haga sentir que te intereso un poco e incluso quizá, que revisaste la ortografía del mensaje dos veces antes de enviarlo sólo para que lo notara.

Odio la forma en la que abrevias las palabras y no agregas ningún signo de puntuación, pero mi corazón se detiene cada vez que recibo un mensaje tuyo por muy mala ortografía que éste tenga.

Odio como pasas horas conectado sin escribirme y cuando yo decido tomar la iniciativa tu optas por solo ver el mensaje y no contestar. Me hace sentir tan confundida la forma en la que te comportas

MielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora