Otra vez se encontraba en esa sala de espera del hospital, lo único que veía era el ir y venir de personas o doctores. Pero solo le importaba la vida de la persona que mas amaba en el mundo.
Quería que todo esto fuese una horrible pesadilla.
Vio que se acercaba el doctor que atendía a Jimin, al verlo frente a el se levanto de una de esas sillas y pregunto por su amigo.
-¿Cómo esta Jimin?-, estaba muy angustiado, pero la mirada de tristeza del doctor lo ponía aun más.
-Jimin..., el esta muy grave, su enfermedad ya esta a punto de terminar con el-
Yoongi tenia miedo de hacer la siguiente pregunta, pero la hizo, -¿Cuánto tiempo le queda?- su voz se escuchaba rota
-Menos de un mes, posiblemente unas dos semanas-, el doctor se sintió triste al ver a Yoongi tan mal, tan destrozado. -Iré a ver como sigue, lo mantendré informado-, dicho esto se fue.
Yoongi se volvió a sentar en la silla, y sus lágrimas empezaron a salir por montones, no podía imaginar lo que pasaría cuando Jimin ya no este con el.
De pronto vio como un pequeño niño de no mas de seis años se sentó junto a el, tenia puesta una gorra
-Hola, me llamo DaeHyun-, dijo con esa tierna voz de niño
-Hola-, contestó el mayor con una sonrisa débil
-¿Cómo te llamas?-
-Soy Yoongi-
-Hola Yoongi, oye ¿por qué llolas?-
-No podrías entenderlo, solo que estoy pasando un mal momento-
-Ya no lloles, no me gusta vel llolal a las pelsonas, eso no es bonito-, Yoongi sintio ternura al ver el puchero del pequeño niño
-No es tan sencillo-
-Debes sonleil-, el niño se quito la gorra que tenia puesta, dejando al descubierto su cabecita, la cual no tenia cabello, -Mila, yo estoy enfelmito, siemple veo que mis papis están tlistes pol esto, solo les digo que no hay que estal tlistes, polque se que yo un día voy a estal mejol-
Yoongi se conmovió por las palabras del pequeño, veía felicidad en sus ojos aun teniendo esa horrible enfermedad.
-Eres un gran niño-, sonrió acariciando la cabecita del menor
-Glacias, es lo que mis papis y mi doctol me dicen-
-Creo que alegraste un poco mi día-
-Eso es bueno, pelo yo ya me tengo que il o mis papis se enojalan, solo lecuelda que pol mas malo que sea el momento, una sonlisa puede cambialo todo-, el niño se bajo de la silla y se fue corriendo hasta alejarse del otro.
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Una semana después...
Yoongi le había llevado un peluche de regalo a Jimin. Todos los días le regalaba algo cuando lo visitaba en el hospital.
-Hola Jimin, ¿cómo te sientes hoy?-
-Hola, pues por el momento me siento bien, solo que no me acostumbro cada ves que me veo al espejo, y mi cabello ya no esta-, lo dijo con una cara de tristeza.
-Pero como sea que te veas eres muy bonito-
El contrario se sonrojo. -Gracias hyung, eres el único que me hace feliz en estos días-
-Lo hago porque te quiero como no tienes idea-
-Yoongi..., te quiero confesar algo, no se como lo quieras tomar, tal vez mal o simplemente no te importe, pero...-. Jimin no estaba seguro si decirselo a Yoongi, y aunque ya lo había analizado millones de veces, la conclusión era la misma. -Creo que, estoy enamorado de ti-, bajo su cabeza con algo de pena.
A el mayor le sorprendió escuchar eso, pero se armo de valor y se ánimo a decirle a Jimin lo que sentía desde hace tiempo.
-Me creerías si te digo que yo también estoy enamorado de ti-
