Tyler estaba sentado en la fuente viendo el árbol de navidad del centro comercial, era muy chillante para su opinión. Demasiadas luces.Víctor estaba sentado al otro lado de la fuente viendo cómo los niños se sentaban en las piernas de santa a pedirles sus regalos, y recordó cuando hacía eso.
Después de contarle a santa que quería, se preguntaba nervioso si se acordaría de él, por qué siempre había muchísimos niños, y entonces recordó en el primer niño que se fijó en su vida. Sus ojos azules, su cabello, y su sonrisa lo mantuvieron atontado en toda la fila, por esa razón, por ese niño lindo, su color favorito había sido el azul. Y ese día él había pedido un carro azul.*Flashback*
—¡Mami, Mami!, Víctor estaba emocionado de pedir su regalo.
Su mamá lo cargo, seguro estaba cansado de tanto esperar, era una fila enorme:—Dime cariño.
— ¿Y si luego de pedirle mi regalo a santa, se olvida?, sus labios hicieron un tierno puchero y su mamá se carcajeó.
— Mi amor, ¿como crees que se olvidaría del niño más lindo? Junto las narices y el se puso a reír.
Su madre lo bajo de nuevo. Víctor se corrió al lado para ver la fila, tal vez ya no eran tantos, pensó.
Pero sus ojos se detuvieron en unos ojos azules
— ¡Mamá, mamá! ¡Mira los ojos tan bonitos!
Su mamá giró, y sonrió.El niño le sonrió, y el se sonrojo tapándose sus mejillas.
Me gusta el color azul, susurro.
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Cartas para el chico gay
Short StorySiempre pensé que era hermoso. Con sus cortes en las muñecas. Con sus grandes ojeras. Con su sonrisa falsa. Con su homosexualidad. Siempre...Pensé que era hermoso.