XXIII. La persona que perdí

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Cada vez que te nombran.
Cada vez que te recuerdo.
Cada vez que te veo.
Siento que me desvanezco.
Eres la persona más hermosa que he podido conocer.
Eres la persona que me perdió.

Se vuelve cada vez más doloroso.
Solo siento presión en mi pecho. No puedo respirar.
A pesar de mis rezos a la nada aún desespero por morir.
Escribirte poemas es en vano, ni siquiera calma mi alma. Solo es un momento de impulso que se torna en rabia e impotencia.
Algunas veces he golpeado la pared. El agujero ya no me importa.

Cada vez que te oigo me golpea tu voz. Profundo en el barranco. Solo soy una cáscara sin sentido.
Lo único que hago por las noches es mirar el techo y llorar.
No sé qué hacer.

Eras la persona más dulce y hermosa que jamás conoceré.
Eres la persona que me perdió.
Eres tú.
Solamente tú.
La persona que perdí.

Lluvia de papel© (Finalizada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora