DIECIOCHO

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Continúe con mi corrida sin rumbo hasta llegar a una parte del lugar que no habia visto antes, al mirara haciaa arriba había una pila de juguetes, muchos rotos, el espacio era nulo porque habia muchos armatostes por todos lados.
En una de las esquinas vi una gran caja de madera, la cuál me llamó mucho la atención ya que escuchaba ruidos provenir de ella. Sin pensarlo dos veces ne acerqué y la miré desde todos los ángulos posibles y acerqué mi cabeza a ésta para tratar de oir de qué era el misterioso ruido que emanaba hasta que lo volví a escuchar...era un ¿ronquido?
Al girar al rededor de la caja por décima vez vi que tenía unas cuantas rendijas entre sus tablas asi que acerqué mi ojo mientras cerraba el otro a una. Lo que vi me dejó boquiabierta por unos segundos y es que ¡los chicos estaban ahí! Me sentí tan feliz al tener este hallazgo pero debía buscar una manera de abrirlo, como no sabía que hacer opté por tratar de despertar a alguno.

--Richie! Hey, despierta, soy Lucy, los encontré...- Susurré lo suficiente para que me escuchen ellos pero no Eso.
El jovencito dentro de la caja comenzó a desperezarse hasta que fijo su vista en mi y sonrió al verme con claridad.

--No puedo creerlo! Si viniste! Sacanos de aquí rápido!- Al decir esto empezó a mover a sus amigos y despertarlos. Y asi lo hizo; de repente Eddie, Mike, Beberly, Ben y Bill estaban despiertos, suplicando ser sacados de allí.

--Pero, como puedo sacarlos, no tiene ninguna cerradura!

--Trata de buscar algo para romper las tablas- Sugirió Ben.
Miré a todos lados tratando de ver que podía servir hasta que vi un vara de fierro, eso seguramente ayudaría.

--Lo tengo, los sacaré ahora.- Exclamé con vigor.
Me acerqué a la caja alzando los brazos con la vara, sosteniendola firmemente y di el primer golpe con fuerza y rajé un poco una de las maderas, les advertí que se arrinconaran para que no los golpée y di otro golpe, y otro, y otro mas fuerte hasta que rompí gran parte de la caja, pertimitiendo ver a mis amigos con nitidez tiré el fierro lejos y me aproximé para retirar los restos de madera rota así mis amigos pudieran salir pero al acercarme noté el horror en los rostros de cada uno.
No pude voltear ya que antes de que pudiera reaccionar una gran mano apretó mi cuello desde atrás con fuerza y con riesgo de dejarme sin aire.

--Sueltala madito, dejala ir!- Gritaba Beverly. Los chicos por otro lado trataban de romper las mas las maderas pero era imposible.

--Vaya, vaya...¿creíste que podrías huír de mi y tener la osadía de dejarme sin mi deliciosa cena?- Pronunció el payaso detrás mío.

--D-dejala! N-no vayas a las-lastimarla, hijo de p-perra!- Anunció Billy.

--¡Uy! ¡Q-que m-mi-miedo t-te-te-te-tengo!- Exclamó la criatura y no pude contener un gruñido ahogado por la malvada burla de éste.--Acepten su triste destino, se convertirán en mi alimento, Club de los perdedores, y no hay nada que ustedes puedan hacer.

Y ahí fue cuando se encendió la lamparita en mi mente...ellos no podían hacer nada, pero yo si. Si hubiera una manera de convencer a aquél ser tal vez los dejaría en paz.

--P-pennywise!- Hablé con una voz raspada.--Por favor! Solo, so-solo escuchame...-

--Que tanto balbuceas humana?- Inquirió.

--Si dejas, si los dejas en paz, yo...yo me quedaré en su lugar.- Anuncié.

-Qué estás loca? De ninguna manera, nos vamos todos o ninguno!- Berrinchó mi primo.

--Richie. Está bien. Yo solo, solo quiero que ustedes esten bien, yo lo estaré también, si los veo a salvo.

--Mmm...y porqué te preocupan tanto estos niños estúpidos?- Preguntó Pennywise.

--Porque son muy importantes para mi, porque no tenía a nadie que se preocupe por mi y porque no merecen esto. Y no son estúpidos!- Informé con seriedad.

-Por favor Lucy, no hagas esto.- Gritó Rich.

--Si los dejas salir de aqui yo me quedaré, yo...yo seré...seré esa "mascota" que tanto quieres.- Dije y sentí un ligero rubor apoderarse de mis mejillas.

Eso quedó en silencio por unos segundos, para luego decidir al fin.

--Entonces, tu los salvas, ellos salen y tu...te quedas.- Pronunció pero fue más un pensamiento.

--S-si. Eso haré, me quedaré el tiempo necesario, pero a ellos dejalos salir.- Dije sosteniendo su mano pues ya me estaba doliendo demasiado su agarre.

-Bien...entonces... ¡Serás una perfecta mascota!- Admitió con felicidad.

Su brazo comenzó a descender y cuando mis pies tocaron el suelo me soltó despreocupadamente, tosí un poco.

Al girar y verlo el me hizo una seña para mostrarme esa jaula donde me había encerrado anteriormente como para invitarme a entrar. Le di una fría mirada de reojo y me aproxime a el gran objeto y al entrar finalmente cerré la puerta yo misma para demostrarle la "devoción" que estaba teniendo en este momento. Mis amigos estaban sollozando, obviamente mi idea los golpeó fuerte.

--Bien, ahora cumple tu parte. -Dije de manera desinteresada.

No pude hacer nada al ver como el malicioso y sin duda tramposo payaso se acerco a la caja y la pateó con gran fuerza sacando la caja con mis amigos fuera del lugar, ya que estaban cerca de un gran agujero que habia en los bordes de la alcantarilla.

--Nooo! Pero ¡¿Po-por qué?! Grité con un gran dolor.

--Dijiste que querías que ellos salgan...yo solo los ayudé a salir!- Dijo de manera divertida.

--P-por qué eres asi?- Susurré llorando.
Las lágrimas brotaban de mis ojos a gran escala, sin embargo no debía ser débil, no ahora, si ellos no estaban a salvo no habia razón por la que yo tuviera que estar ahí encerrada, asi que nuevamente mi mente ideó un plan. Pero éste sería mucho mas extraño de lo que pretendía, pero era la única manera.



Me extrañaban? Yo se que si :3 ahre
Falta poco para el final así que voy a actualizar más rápido xD
Y feliz Navidad for all <33

When Pennywise And The Lil' Girl Be Find.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora