Capítulo 3 - El rencuentro

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El castillo Hogwarts de Magia y Hechicería se veía majestuoso, igual o más hermoso que cuando ellos estudiaban ahí, los pasillos abarrotados de estudiantes que corrían para llegar a sus siguientes clases, el Bosque Prohibido con sus criaturas y árboles milenarios, el Lago Negro con el calamar gigante, el campo de Quidditch, todo era simplemente mágico. A las puertas del castillo, poco antes de las 6:00 pm aparecieron varios jóvenes que habían vivido su adolescencia entre las paredes de ese castillo. La sorpresa al verse fue bastante, ya que no se imaginaban que sus compañeros también habían sido citados.

-¿Hermione?- dijo un pelirojo al tiempo que su amiga corría a abrazarlos -¿Cómo es que tú también estás aquí?- preguntó extrañado.

-¡Harry, Ron! Que gusto verlos. Recibimos una carta que teníamos que estar aquí a las 6:00- dijo la castaña señalando a sus compañeros que venían con ella.

Theo y Blaise sólo hicieron un gesto con la cabeza en señal de saludo, al igual que Harry y Ron. Algunas viejas rencillas no cambian y Harry y Ron desconfiaban por completo de los nuevos "amigos" de Hermione.

Se escuchó un ligero plop y dos personas más se aparecieron en la entrada.

-Por Merlín, ¿qué es esto? ¿una reunión de ex-alumnos?- preguntó la pelinegra al tiempo que observaba a sus compañeros.

-¡Theo, Blaise! ¿Qué hacen aquí?- preguntó Astoria mientras iba a saludar a sus amigos.

-Más bien, ¿qué hacen ellos aquí?- preguntó Pansy con el ceño fruncido al ver al trío de oro reunido una vez más.

-Me parece que todos hemos sido citados aquí a la misma hora, ¿no?.- repuso Harry de manera brusca al tiempo que miraba desafiante a Pansy, gesto que no pasó desapercibido por nadie. Hermione lo miró un tanto sorprendida, Harry nunca había sido rudo o brusco con las mujeres, ni siquiera con las serpientes. ¿Qué mosco le había picado?.

-Ya Harry, alguna explicación debe tener McGonagall para que nos cite a todos el mismo día.- repuso Hermione tomando el brazo de su amigo.

Se escuchó un plop más y todos miraron a las personas que habían llegado.

-¡Astoria!- gritó una castaña al ver a su hermana.

-¿Daphne? ¡Que gusto verte!- ambas hermanas se dieron un abrazo, ya tenían tiempo sin verse. La escuela las absorbía a ambas.

-Hola chicos.- dijo Luna con voz tranquila al acercarse a saludar a sus ex-compañeros.

-Muy bien, esto ya me está asustando.- dijo Ron al ver a tanta gente reunida. -Ya nada más falta que llegue el hurón para que el nido de serpientes esté completo.-

No pasó ni un segundo cuando un tercer plop se escuchó dejando ver a la figura estilizada y elegante de Draco Malfoy.

-¿Qué decías Weasley?- Preguntó Zabini al tiempo que saludaba a su amigo.

Hermione y Luna soltaron una pequeña risa que hizo que las orejas de Ron se pusieran coloradas. Draco las miró con curiosidad, hacía tiempo que no veía a ninguna de sus ex-compañeras y para hacer honor a la verdad todas habían cambiado de manera favorable, Granger en particular.

-Esto es bastante extraño.- dijo Harry

-Gracias por tu sabiduría Potter, pero no es necesario que resuelvas todos los misterios del universo tú solo.- dijo Draco al tiempo que miraba hacia la entrada del colegio donde una figura se acercaba hacia la reja de entrada -De seguro McGonagall nos explicará el porque de este "agradable" encuentro.-

Dulces sueños, mi futuro bebé...Where stories live. Discover now