¿UN DÍA NORMAL? NO LO CREO

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Lentamente Zero se reincorporó en la cama, cada centímetro de su cuerpo dolía, se agarró la cabeza e imágenes del día anterior vinieron a su mente; se puso rojo como un tomate maduro y más a un cuando las manos de Asami atraparon su cintura. Intentó salir corriendo al baño, mas el dolor en su cuerpo se lo impidió, así que decidió conversar con Asami.

— me podrías soltar porfavor —

— no, quiero estar así contigo— mientras le agarraba la cintura y tenía su barbilla en el hombro de Zero.

— sueltame, estoy pegajoso y quiero darme una ducha —

— ¿pero podrás caminar hasta el baño?, o prefieres que yo te lleve en brazos —

— no gracias puedo caminar, por eso sueltame ahora —

— como desees mi ángel —

Zero vio como Asami se levantaba y él trato de hacer lo mismo, pero para su desgracia las piernas le fallaron, propiciando que se caiga al suelo; al ver aquella escena Asami rió por lo bajo, lo que menos quería era avergonzar a su querido cazador, ademas él tenia la culpa de que Zero este así.

Camino hasta donde se encontraba Zero y contra su voluntad lo levantó del suelo, lo cargo estilo princesa hasta llegar al baño, para luego preparar la bañera; entraron él y  Zero a la bañera, para luego empezar a lavarle el cuerpo y también el cabello.

Zero se quejó por aquello pero se dejó bañar, por alguna extraña razón siempre Asami lograba convencerlo, así que sólo disfruto de aquellas manos que lo tocaban; después de aquéllo hizo lo mismo con él y luego enjuago su cuerpo y el de Zero. Salieron ambos de la bañera, el agua caliente había relajado su cuerpo y ahora ya podía caminar, lentamente pero por lo menos era ya un avance.

Se empezaron a vestir, Asami con uno de sus típicos trajes, mientras Zero se ponía unos pantalones negros ajustados con cadenas a sus costados, se puso un polo apretado de color azul claro, una casaca negra ajustada con diseño de alas en la espalda y luego se paso una de las manos por sus finos cabellos, peinandolos para atrás dándole un aspecto rebelde y sensual.

Al rato bajaron por las escaleras y curiosamente todos los empleados estaban esperándolos, haciendo dos filas al pie de las escaleras; al llegar al final Zero se dio cuenta que la mayoría de los sirvientes eran demonios, solo había unos cuantos humanos y estos parecían ser los jardineros.

Asami empezó a hablar y presentar a los empleados de confianza, ellos serían los encargos de presentarlo ante los demás.

— ellos son mis empleados de confianza Zero, cualquier duda que tengas les puedes preguntar a ellos —

— ok, no hay necesidad de presentarlos, ya los conozco a todos —

— ¿estas seguro? Zero, ya que aquí falta uno de ellos —

— ¿Quién? — pregunto

— yo señora —

Zero cerró los ojos ante la palabra dicha, odiaba que lo llamen de esa manera, para luego ver al joven que se acercaba; era un joven que aparentaba su misma edad, pero siendo un demonio era imposible saber si era verdad.

Zero cerró los ojos ante la palabra dicha, odiaba que lo llamen de esa manera, para luego ver al joven que se acercaba; era un joven que aparentaba su misma edad, pero siendo un demonio era imposible saber si era verdad

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( EL será uno de los empleados de confianza de Asami, su nombre es Yue )

El joven se acercó con rapidez e hizo una reverencia, Zero se sintió incómodo ante la atenta mirada de todos y Asami notó aquello; estuvo apunto de hablar mas el maldito aparato ese sonó, ahora ya era oficial Zero odiaba los teléfonos. Asami contestó la llamada y luego se retiró, no sin antes decir.

— el es Zero Kiryuu mi esposo, ahora todos le deben respeto, también de ahora en adelante lo llamarán Zero sama, han entendido —

— hai, Asami sama — todos los sirvientes hablaron al unísono.

Después de aquello Asami se fue y todos los empleados se despidieron de Zero con una reverencia, excepto los empleados de confianza de Asami; los cuatro tenían que enseñarle la mansión, pero un pequeño problema surgió durante el transcurso, haciendo que Aldebaran, Mayuni e Miyuki se fueran, dejando a Yue encargado de hacer conocer la mansión a Zero.

Ambos caminaban por la mansión en completo silencio, hasta que Yue habló.

— te crees lo suficientemente bueno para estar con Asami sama, no — hablaba de forma despectiva hacia Zero.

— porque dices eso—

— porque un ser inferior como tu no puede estar a la altura de mi señor —

Zero se molesto bastante al escuchar aquéllas palabras, siempre tenían que haber ese tipo de seres en todas partes.

— ya cállate, que es lo que quieres demostrar al hablar así —

— quiero ver en que eres bueno para que mi señor te haya escogido —

— porque tendría que mostrarte en lo que soy bueno —

— porque a si demostraras mi punto, que eres un ser inferior e incapaz de estar a la altura de mi señor —

— esta bien, en que quieres que te demuestre de lo que estoy hecho —

— una batalla cuerpo a cuerpo y otras cosas mas —

— de acuerdo —

Yue guió a Zero hasta una habitación repleta de armas de todo tipo, ahí Yue le dijo que sería tiró al blanco, esperando que fallé en algo tan simple según él, pero se llevo la gran sorpresa que no falló ningún tiró; molesto le presentó todo tipo de armas de fuego, quería que fallé al disparar, pero no lo hizo. Después se encaminaron hasta un lugar otro lugar, entraron a un campo de tiró con arco, pero Zero tampoco falló, demostrando que era muy buen arquero.

Dispuesto a demostrar lo inferior que era, lo llevó hasta un dojo que había en la parte trasera de la mansión, esta era su última oportunidad que tenía de menospreciar a Zero, pero al igual que las anteriores no tuvo falla alguna; molesto cambio su apariencia y empezó a disparar contra él, jamás aceptaría a Zero como consorte de su señor.

Yue disparaba cristales en forma de lanzas que él mismo creaba contra Zero, pero ninguno llegaba a dañarlo; descontrolado y furioso sus movimientos se hicieron mas erráticos, dándole la perfecta oportunidad a Zero de vencerlo. Zero en un movimiento rápido logró derribar a Yue, y este ya nada pudo hacer, tan solo mirar y decir.

— ganaste, eres muy poderoso, demostraste que estaba equivocado contigo —

Zero se puso de pie y ayudo a Yue a levantarse del piso, para después caminar a la salida en completo silencio, mientras Yue solo miraba como se iba del lugar; él agachó la cabeza y solo susurró al ver a Zero salir de la habitación.

— Zero Kiryuu ahora tienes mi completa lealtad, mataré por usted si me lo ordena — mientras sonreía de forma macabra y  sus ojos se tornaron de un negro espectral.

CONTINUARÁ

Espero que les guste sin mas me despido con muchísimos 💋💋💋💋🙋🙋🙋🙋.

Un dato curioso, en esta historia estaba como uke Kaname, no Zero, pero al ver que no daría tan bien, lo cambie por Zero, díganme si quieren leer el primer capítulo de la historia en los comentarios, para a si publicar la historia, ojo pero solo será el primer capítulo, a no ser que les guste.

Bye bye

EL ESPEJO DE MI FELICIDAD (私の幸福の鏡  Watashi no kōfuku no kagami)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora