Capitulo:22

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J.P se dirigió dónde estaba el gerente el menor se quedó mirándolo, estaba bastante lejos y no podía escuchar lo que decían pero después de un tiempo muy corto ambos se acercaron a la mesa, hablo tomo asiento dedicándole una sonrisa al chico

-Disculpen las molestias ahora mismo les atenderá alguien mas- dijo el gerente-¿sabe el nombre de la chica que lo atendió hasta ahora?-pregunto mientras llamaba a un chico alto con señas,

-No, la chicha no se presentó, pero si se portó muy altanera y grosera con mi acompañante- señalo el Alfa

-Bien, ¿Cómo era la chica?- pregunto, el chico al que llamo ya estaba a su lado-el es Christian, los atenderá ahora- presento al hombre (un Beta)

-La chica es pelirroja de estatura mediana y Alfa, me parece- dijo el mayor después de que el otro camarero se presentara y retirara a hacer el cambio de orden

-Bien, en seguida será reprendida y desde este momento le ofrezco una disculpa- hablo el gerente dirigiéndose a su oficina, no sin antes pedirle a una de las supervisoras del lugar que llamara a la chica que Juan Pablo le menciono antes, ya que era la única chica pelirroja que trabajaba allí

Juan Pablo no sabia el error que acababa de cometer, la chica fue llamada a la oficina y reprendida seriamente por el gerente, a demás fue suspendida de su trabajo por tres días porque no era la primera vez que se quejaban del servicio de la chica y sobre todo malos tratos hacia lo Omegas, tanto chicos como chicas, ella salió de la oficina enojada, recogió sus cosas y salió decidió esperar a que Pablo y Alex salieran

Paso el tiempo, fueron servidos los platos que Alex había pedido para comer, J.P pidió de bebida una limonada para ambos, cuando terminaron de comer el mayor le dijo a Alex que pidiera de postre lo que quisiera, el Omega pidió una rebanada de pastel de vainilla, ya que quería compartirlo con el mayor y a el no le gustaba el chocolate, ambos comieron, Pablo se dirigió a pagar y le dijo a Alex que se adelantara al auto pero que grabe error

El menor salió no sin antes darle un beso al mayor y mientras caminaba fue jalado por alguien del brazo y lanzado al suelo sin mucho cuidado

-¿Qué te sucede?- pregunto el pequeño molesto por la brusca acción, se intentó levantar pero fue empujado nuevamente el suelo con un poco mas de fuerza

-¿Qué me pasa?, ¡pasa que gracias a ti y a tu novio me suspendieron y me van a descontar los tres días!- grito la chica muy enojada y con "la voz"- ahora ni se te ocurra moverte, te tengo una sorpresa- le dijo usando aun "la voz" y tomándolo del cabello sin mucho cuidado

Pero justo cuando lo soltó alguien la jalo ella por detrás haciéndola caer del mismo modo que Alex, el menor miro a quien era su salvador y se dio cuenta que era el mismo joven que los había atendido a el y a pablo minutos antes

-¡Déjalo!-grito el Beta-Caro, te van a despedir si se enteran de esto, si en verdad te importa el trabajo como dices deja de joder tanto a los clientes-el Beta mas clamado le habló a la chica

-¡No es justo, siempre niños ricos viene y se quejan, sin ser verdad lo que dicen!-grito enojada lanzándole la navaja que tenia en la mano y que planeaba usar para lastimar gravemente el Omega

El Beta esquivo la navaja, pero al hacer esto la navaja paso cerca del Omega dejando una cortada en una de las mejillas del chico, a Alex le dolió y soltó un pequeño chillido, eso atrajo la atención del beta, la sangre de su mejilla lo altero, estaba solo, sangrando y "su Alfa" lo había dejado solo

El beta detuvo a la chica y llamo al guardia del restaurante, el hombre se la llevo y de seguro ahora si perdería el trabajo, se acercó al pequeño chico e intento revisar su herida pero este se alejo con miedo, en eso Pablo llego y se encontró con esa situación, obviamente pensó lo peor

-¿Qué paso aquí?-hablo preocupado el Alfa acercándose a Alex y gruñéndole al Beta porque pensaba que el lo había lastimado

-La...la chica....pelirroja...ella me ataco-respondió

-Yo lo ayude, si no hubiera llegado yo, ahora el estaría peor-aseguro el Beta antes de que pablo se enojara mas

-Bien, ahora si, hablare con tu jefe y espero que la despidan- hablo enojado y abrazando al chico sin importarle que la sangre manchara su ropa

-Estoy de acuerdo, pero antes hay que entender al Omega- le señalo al Alfa

-Tienes razón- asiente y deja un pequeño beso en la frente del chico que siga abrazado a el

-Yo estoy estudiando para médico, ¿puedo revisarlo?-pregunta el Beta

-Claro, pequeño ¿te puedo dejar con el mientras arreglo este asunto?-le pregunto a Alex mientras se despegaba un poco para poder verlo mejor

-Si, esta bien, pero no tardes, quiero volver a casa-le respondió el menor

El mayor beso al mas pequeño y l dejo ene manos del Beta-por cierto mi nombre es Christian- le dijo el Beta al Alfa antes de que este se marcha a la oficina del jefe de personal del restaurante, la chica por otro lado estaba siendo detenida por el guardia en la entrada del establecimiento y en cuanto el Alfa entro el hombre con la chica lo siguió

El Alfa entro a la oficina del jefe y le planteo la sucedido, ambos hablaron durante un rato mientras al Omega lo curaban y una vez estuvo mejor tanto el chico como el Beta fueron, a la oficina y entraron, de inmediato el Omega corro hacia el Alfa ya que la chica aun se encontraba allí, paso un rato aun mas largo, la chica fue despedida se le agradeció al Beta y se le regreso el costo de la comida al Alfa

-Gracias por todo Christian-le dijo el alfa saliendo del lugar

-No hay problema, si necesitas algo algún día solo llámame, Alex ya tiene mi numero-le dijo despidiéndose y dándole una mano en señal de respeto

-Alfa ¿nos vamos?-le pregunto el chico- quero ir a casa-lo apresuro

Salieron del lugar Pablo condujo durante una hora de regreso, el Omega no paraba de hablar de todo lo que Christian le había contado y eso estaba por sacar de sus casillas al Alfa, no le gustaba que SU chico hablara de otro hombre aunque fuera un Beta

Cuando llegaron el pequeño bajo del auto al mismo tiempo que J.P y lo abrazo, la herida que tenia no era profunda así que el beta lo único que hizo fue limpiar la sangre y en estos momentos estaba curada, entraron a la cabaña y recogieron las cosas, ya que habían pasado un fin de semana juntos, ahora tenían que regresar porque tenían clases, terminaron de guardar todo en el auto, incluso las cosas que el mayor le regalo mas chico y se subieron para poder regresar a la ciudad

¡Esa maldita apuesta! (En revisión Y Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora