Ya se daban las 7:30 am en el reloj del cuarto, ese día entrabamos a clases a las 9:30 am asi que me decidi a levantarme y despedirme de los señores Coman para poder dirigirme hacia mi hogar. Debía ducharme, colocarme el uniforme, cojer la mochila e irme a mis clases.
Bajé las escaleras, me despedí y emprendí mi camino a casa.
Fue un tramo bastante largo pero placentero, la paz del vecindario me ayudó a relajarme. Llegué a casa y parecía no haber nadie pero escucho una puerta abrirse y era la del patio trasero, Ray estaba cortando el césped al parecer.
Subí a mi cuarto, me duché y coloqué el uniforme del colegio, con mi mochila puesta bajé las escaleras y me dirigí a la cocina. Ya estaban sentados mis padres en la mesa desayunando pero ambos se levantaron de sus lugares y se dirigieron a mi para abrazarme, los tres comenzamos a llorar, secamos nuestras lágrimas y nos sentamos al rededor de la mesa pero ninguno medió palabra hasta que hice la gran pregunta....
¿Donde está mi mamá?
Sus caras de impacto eran totalmente notables...
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11 otoños y sigo contando [Editando]
Ficção AdolescenteAnne es una niña de 11 años alegre y que vive con una sonrisa en su rostro, pero todo cambia a partir de ahora... ¿Que tan duro puede ser crecer?