Capítulo 29

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Cuatro días después...

1/julio...

10:00am...

¿No has sabido nada de Melissa?-preguntó Ángel. He hablado con ella y hasta ahora se encuentra bien.-respondió David sirviéndose agua. ¿A donde vas hoy?-preguntó Ángel. Quede en salir con un amigo de Melissa, acepte la invitación porque se que si ella ve interés en sus amistades, se me hará más fácil seguir ganandome su confianza.-dijo David. Es una muy buena idea no lo había visto por ese lado.-dijo Ángel. Vienes o tienes algo que hacer.-dijo David. ¡Nah! Tengo que ir a reportar el progreso al jefe.-dijo Ángel. Después no digas que no te invité.-dijo David. Cuando sea algo con Melissa voy si me invitas porque no puedo ir sin ser invitado por ti.-dijo Ángel despidiéndose. Nos vemos después.-dijo David.

8:45pm...

David llegó al bar, parqueo la guagua cerca y entró. Mensaje de Jey: Cuando llegues, estoy en la barra. David caminó hasta la barra. ¿Cómo estaba el tráfico?-preguntó Jey. Estaba un poco pesado.-respondió David. ¿Que vas a tomar?-preguntó Jey. Una Heineken.-respondió David. ¡Bartender! Deme dos Heineken.-dijo Jey. ¿Y Genna?-preguntó David. No sé, en la casa supongo.-respondió Jey. ¡Aquí tienen!-dijo el Bartender. Comenzaron a beber un par de cervezas y tragos.

Mientras en la casa de Melissa...

¡Ring! ¡Ring!

Melissa: ¡Hola Genna!
Genna: ¡Hola perra ingrata! Mi negro me dijo que David esta con él.
Melissa: ¡Sí lo sé! David esta texteando conmigo.
Genna: Y estas preparada para lo que suceda.
Melissa: ¡No! Pero me urge saber todo lo que pueda sacarle Jey.
Genna: ¡Tranquila! Esperemos que resulte.
Melissa: Te llamo ya mismo que mamá quiere que le ayude a fregar.
Genna: ¡Esta bien! Nos mantenemos en comunicación.

9:30pm...

David estaba ya un poco pasado de tragos, Jey y él conversaban acerca de autos y otras cosas. ¡Cuéntame! ¿Por que decidió tu familia mudarse para acá?-preguntó Jey. Es algo complicado de explicar, después de mi accidente no fueron igual las cosas.-respondió David. ¡Mmm! ¿Hasta ahora que te parece el lugar?-preguntó Jey. Ya lo conocía de antes, pues en mi infancia viví aquí un tiempo aunque no me gusta mucho porque me trae malos recuerdos.-dijo David. ¿Sobre?-preguntó  Jey. ¡Normal! Pero es muy buen lugar.-respondió David. Pos claro si Melissa vive aquí.-dijo Jey riéndose. Además de ella, estoy aquí por un propósito.-dijo David tomando un sorbo de su trago. ¿Propósito? ¿Cuál es?-preguntó Jey intrigado. Pues que te digo, después de una segunda oportunidad de vida, algo me dice que tengo un propósito.-respondió David. ¿Te gusta Melissa?-preguntó Jey. No creo que pueda negarlo en estos momentos, amigo yo deseo esa mujer con todas mis fuerzas.-dijo David. Y porque no te lanzas a pedirle que sea tu novia.-dijo Jey. Hay cosas que ella no entiende y que nadie entenderá.-dijo David. Escuche cuando bebé y ella hablaban y ella decía que siente celos de una tal Selene.-dio Jey. ¿Selene? ¡Eso es pasado!-dijo David mirando a lo lejos. ¡Cuéntame! Para eso estamos bro.-dijo Jey. Yo siempre fui un mujeriego de esos que no tienen remedio, luego conocí a Salem y a su hermana Selene. Yo me truqueaba a Salem quien era la esposa de mi mejor amigo y a muchas mujeres más. Luego intente aquietarme con Selene, su paz me acordaba mucho a mamá y creí enamorarme pero no funcionó. Ella no estaba dispuesta a verme llegar con todas las mujeres que me tiraba y yo la entendía a la perfección, así que decidimos dejarnos. Le juré que la amaría hasta la muerte y así fue, morí y volví a vivir.-dijo David. ¿Y Melissa? ¿Que piensas de ella?-preguntó Jey. Melissa es una niña muy dulce, inteligente, hermosa ¡Uff! No se que me pasa pero, ella ha despertando en mi un sentir que yo no había sentido desde que se acabo todo con Selene. Pero mi ángel guardián no me permite enamorarla.-dijo David. ¿Ángel guardián?-preguntó Jey confundido. ¡Sí! Él dice que lo nuestro no puede ser.-dijo David. Creo que se te subieron los tragos hermano.-dijo Jey riéndose. ¡En fin! Salud por esa mujer que me vuelve loco pero que no puedo enamorarla.-dijo David alzando la cerveza. ¡Estas loco! Pero salud.-dijo Jey. Ya debo irme.-dijo David. Estas pasadito de alcohol, mejor te llevo a tu casa.-dijo Jey. ¡Estoy bien!-dijo David tambaleandose. Deme la cuenta.-dijo Jey. ¡Aquí tiene!-dijo el bartender entregandole una nota. Ya me voy.-dijo David marchándose. ¡Tome!-dijo Jey entregándole el dinero. ¡Buenas Noches!-dijo el bartender. ¡David! ¡David!-gritó Jey siguiendolo hasta el parking. ¡Estoy bien!-dijo David montándose. Si te pasa algo no me lo perdonaré y las chicas menos.-dijo Jey. ¡Adios!-dijo David ignorandolo y marchándose. Jey le envío un mensaje a Melissa.

Tu Ángel Guardián Donde viven las historias. Descúbrelo ahora