Soldado

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Inspirada en Lawrence Oates y en la carta de Diego de León a su esposa antes de su ejecución.

Mi nombre es Bruno y tengo 3 meses que no veo a mi familia, sigo con la interrogante de si algún día los volveré a ver ya que esto parece no tener fin.

Convivo a diario con balas, explosiones, con gente moribunda que se aferra a la vida, veo a mis compañeros y a mis amigos caer uno tras otro dejando así la oportunidad de volver a ver a sus seres queridos. Y me siento culpable de no haberlos podido ayudar más que en cerrar sus ojos.

La sensación de ver a alguien morir en estas circunstancias es algo confusa, por un lado se que ya no sufrirá más de esta mañdita guerra, de ver estas atrocidades día con día, más sin en cambio sé que el dolor de su familia será tan grande que no puedo evitar que se me forme un nudo en la garganta y rogar a dios que esta pesadilla fulmine.

Me encuentro en el ejército francés donde nuestros error fue creer que teníamos la ventaja sobre los alemanes pues estos, ya habían superado la guerra con trincheras y habían creado una nueva estrategia militar llamada "Blitzkrieg": Consistía en hacer un bomberdeo inicial seguido del uso de fuerzas móviles atacando con velocidad y sorpresa para impedir que pudiéramos formar una defensa coherente.

Ahora se que mi vida está más en juego que nunca, nuestras tácticas ya no funcionan y temo más el hecho de no poder volver a ver a mi amada Odette y a mi apreciado hijo que aún no conozco.

Mi general ha pedido refuerzos pero estos terminan siendo emboscados y masacrados por las trampas puestas en zonas estratégicas de Bélgica. Hace poco cayó un bombardeo cerca de nosotros por suerte no hubo bajas, pero el temor de que pronto encuentren el lugar donde nos hemos refugiado hace que perdamos la fe y esperanza que nos queda.

Aunque a fin de cuentas ¿a quien le importamos? Solo somos marionetas que servimos para intereses de algunos. Para colmo los pocos que quedamos tenemos heridas que difícilmente nos permiten combatir, si logramos salir de aquí solo seremos un estorbo más se harán cargo de nosotros, seremos gente loca la cual no para de decir que sigue envuelto de sangre de sus aliados y de sus enemigos.

Mi vista esta comenzando a ser borrosa, ya casi no puedo ver, escucho sus cañones retumbar más cerca de donde estamos, intento levantarme pero me siento débil, me apoyo en lo que sea que esté cerca de mi, si he de morir, he de morir en pie ya que por vencido jamás me di.

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La muñequita de porcelanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora