El chico de los cigarillos

Veintiuno

Quizás los días que pasaron luego de la última carta de hicieron más crudos, parecía que estos solo te asfixiaban cada vez más. Así se sentía Juvia, ella no podía comprender el porque de su repentino interés en ver el techo y no salir con su amiga. Incluso Lucy le ha recriminado sobre el porque escribió esa carta si iba a pasar los dos meses que seguían como un muerto en la cama. Faltaba poco para las vacaciones de Verano y el calor que empezaba a aparecer la mataba lentamente. Es como ella le decía a todos sus conocidos, su cuerpo no estaba hecho para el verano. Primero su piel se irritaba por el sol, segundo padecía síntomas como asfixia y deshidratación, y por último Gray no formaba parte de sus veranos, no esta vez. Capaz después de la nota lo había estado observando a lo lejos pero eso había terminado cuando esté había empezado a buscarla desesperadamente. En parte pensaba que seguro era curiosidad y en otra que la iba a degollar. Alguna de las dos.
- Juvia, muévete. - Decía Lucy al salir de la ducha ya arreglada.
- ¿Debo ir?- Preguntó por enésima vez en lo que llevaba en la casa de la rubia.
Esta se sentó en la cama donde se encontraba ella y suspiro antes de responder. - Debes ir, vamos. ¡Que el imbécil de Gray no impida que vayamos a ver nuestra banda favorita!
- Dirás la banda favorita de Natsu.- Respondió mientras que la miraba con picardía.
Lucy se sonrojo ante sus palabras y se levantó como resorte de la cama para marcharse nerviosa en busca de su maquillaje. De mientras Juvia se dedicó a vestirse con la remera de la banda a la que iban a ver en el recital y se acercó a la mesa a escribir algo en un bloc de notas al azar de su amiga. Luego de terminar la nota, la arrancó y la puso en su bolsillo.
Lucy volvió con su celular en mano y sonriendo. - Natsu ha dicho que ya están viniendo a recogernos.
- ¿Están?- Preguntó.- ¿Natsu viene con alguien más?
La rubia nerviosa levanto las manos y las agitó mientras formulaba la palabra sorpresa en tono bajo mientras esperaba que la Loxar le lanzara lo primero que tenía a mano. Para su sorpresa eso no fue así, al parecer no tenía ni ánimos de pelear. Una bocina resonó en la entrada y la rubia arrastro a su mejor amiga hasta el auto de chico rosado. Cuando Juvia se decidió a subir al asiento trasero se encontró con su acompañante en lo que sería el resto de la travesía. En ese momento un pensamiento la carcomio rápidamente.

Mierda, es Gray.

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No sé cuántos meses pasaron sin actualizar. Incluso casi olvido la contraseña de esta cuenta. Se darán cuenta del gran bloqueo de escritor que poseía y es que sin mentir este año fue una porquería, no es excusa. Estoy volviendo a hacer lo que antes hacia, escribir, leer e incluso ver anime. Todo este año de malas experiencias me hicieron querer regresar a esta plataforma donde podía escribir y es que no escribo como los dioses pero algunas personas disfrutan de estas pequeñas historias. Gracias a las que esperaron por leer una nueva actualización y perdón por haber tardado tanto e inclusive por la redacción y la ortografía. Feliz Navidad muuuuuuy atrasada y un feliz año nuevo anticipado. Besos y abrazos para todos.