Prefacio

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En la época de la Antigua Grecia en la cual los dioses sobre la tierra, había entre ellos un semidios que es bastante famoso se llama Heracles, quién este nació del fruto prohibido entre Zeus y Alacmena una mortal.

Cuando Hera se enteró de ese romance intentó matar a Heracles mandando una serpiente de dos cabezas, pero el niño era muy fuerte, la venció ahorcándola, es cuando la madre descubre su gran fuerza.

Ya que creció hizo doce trabajos que consistía en atrapar monstruos o hacer limpieza de establos, etc. La diosa Hera le hacia la vida imposible al hijo de su infiel marido poniendo peligros que el fácilmente salía.

Heracles al concluir sus tareas y al regresar a su pueblo, fue recibido con aplausos por toda la población, era tan famoso que provocó más la Ira de Hera, así que lo hechizó haciéndolo creer que los trabajos que realizó con heroísmo no eran suficiente para él.

La Diosa engañó a Zeus para ponerlo en contra de su hijo; la mentira que le dijo es que le quería robar el trono para convertirse en el Dios supremo a parte que había abusado de ella. Entonces, Zeus lanzó un rayo que lo hiere.

Heracles desmayado por el ataque, lo encontró una joven hechicera que tenía el poder de la curación, ésta se lo llevó a su casa para darle atención. Al despertar y mirar su gran belleza se enamoró de ella. Fue reciproco ese amor, eso provocó la furia de Hera. Por lo tanto, manda a Afrodita y hechizó a la esposa de Heracles para que se enamorará de otra persona.

El enfurece por lo que hizo ella y se aleja. Al saber la verdad, enfrentó a Afrodita para que le contara la verdad; ella confesó que todo fue por culpa de Hera, entonces él se fue en busca de su amor.

Pasaron los años, ellos tuvieron cuatro hijos; dos niños y dos niñas. Ambos vivieron en armonía, pero su felicidad terminó cuando Hera hizo beber a Heracles un líquido que lo vuelve loco: la ambrosía. Por tanto, pensó que su familia eran monstruos, los asesinó descuartizándolos. Al día siguiente despertó, bañado en sangre, se suicidó al no soportar el dolor.

Todo el mundo al enterarse de la muerte de Heracles, lloraron su perdida. Se lo llevaron a quemar su cuerpo en una hoguera con hierbas que consumió su cuerpo poco a poco. Su alma se elevó al cielo y le dieron el puesto de guardián de la residencia de los dioses: el Olimpo.

Aunque ya está tranquilo, no podía dejar de pensar en lo que hizo, así que Heracles le pidió a Zeus que lo dejará volver a la tierra para vengarse, entonces le concedió el deseo; pero la condición que ahora no era tiempo. Las palabras de Zeus eran así:

"Solo si hay caos u otra catástrofe en la tierra, volverás. Pero no como el héroe que alguna vez fuiste, volverás con un cuerpo nuevo y la profecía vas a cumplir, esa será tu nueva misión".

Antes de que borraran todos sus recuerdos, mencionó: "Me vengaré de lo que me hicieron daño y sufrirán las consecuencias".

Todo se volvió oscuro.

La conspiración del Olimpo©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora