Déjame Besarte

2°

El beso de Jared era profundo y apasionado, y Jensen tuvo que poner mucho de sí para soltarse y darle la espalda.

-Lo siento Jensen...-le escuchó decir, agitado y realmente angustiado.

Jensen se quedó mirando la puerta, intentando recuperar el aliento. Hizo dos pasos y trabó con seguro la misma.

-No quiero que me digas que lo sientes...-el ojiverde se dio la vuelta para ver a su amigo.- Quiero que me compenses...

Jensen hizo los pasos que le faltaban para llegar a Jared y lo besó con la misma intensidad con la que Jared lo besó primero.
El beso siguió lleno de caricias y palabras que sólo ellos entendían hasta que llegaron a la cama.

Con rapidez y como pudieron se abrieron las camisas, y Jensen se sentó sobre las piernas de Jared, que había quedado sentado en la cabecera de la cama.

Sus besos siguieron con el mismo ardor, hasta que Jared se despegó de sus labios y fue a su cuello.

La sensación era increíble; tan húmedo, tan caliente, tan sexi...

-Jared...

Jensen tomó en sus manos el largo cabello de su compañero, y abrió sus ojos para ver cómo él bajaba con iguales besos por su abdomen, hasta que puso sus manos en el botón de su pantalón.

-Jay... Jay...

El castaño lo escuchó y puso sus manos en la cintura de Jensen, para luego llevarlas a su espalda, abrazándolo como si fuera a irse. Sus brazos lo rodeaban por completo, y Jensen decidió abrazarlo por sobre los hombros.
-Lo siento Jensen...lo siento- intentaba decir agitado por la situación y pegándose a su cuello- No quiero que te enojes...

Jensen suspiró con ternura y se le fue una sonrisa.

-Ojalá pudiera enojarme en serio contigo...

Y vaya que era cierto. Apenas llegó, las ganas asesinas que tenía de reclamarle por haberlo besado en público y por haberlo dejado solo en el escenario, se esfumaron con ese beso que le dio.

Oh Jared... Si supiera el poder  que tenía sobre él, sabría que podía hacerle hacer cualquier cosa sin chistar. Mudarse a Austin había sido una de ellas.

-Te amo Jensen...-dijo mirándolo con desespero- No quiero perderte...

-No... No me vas a perder... Jamás me vas a perder.

-Jared, escúchame Jared... Ey... Tranquilo, no me voy a alejar de ti... Jared...

El castaño iba y venía por el cuarto. Estaban en la sala de estar de la casa de Jared.

-No... Es por eso que viniste, por eso lo dijiste- tenía los ojos llorosos mientras hablaba, y resoplaba como bestia encerrada.
-No Jay... No dije eso...

-Dijiste que tenemos que hablar, que discutiste con Danneel...

-No dije... Sólo déjame aclarte esto, pero necesito que te calmes.

Jensen se acercó y lo agarró por ambos brazos haciéndolo detenerse.

Jared seguía resoplando, nervioso. Las manos le temblaban, y esa era mala señal. Jared estaba poniéndose mal.

-No quiero que te enojes conmigo...

-Nadie está enojado... Jared mírame. ¿Me ves enojado? -Jared lo miró a los ojos y luego negó con la cabeza- Bien... Porque no estoy enojado...

-¿Es por...lo de los besos? ¿Por eso peleaste con Danneel?

-Mmmnn no peleamos con Dannel. Hablamos, un poco fuerte, pero hablamos... y no fue por eso concretamente.