Mi Block De Notas/Diario

28

Una noche tranquila.
Tu dijiste que me irías a ver.
Mientras esperaba hablaba con mi amiga. Esa que tu conociste cuando ella me quito el teléfono.
En eso llama mi padre...
Colgue la llamada de mi amiga para contestarle.
El vendrá tarde por mi.
Pasare año nuevo junto a el y me siento incómoda.
Ya no es el mismo que conocía.
Ya no me toma en cuenta.
Ya no soy parte de su vida.
O Bueno eso el quiere hacer.
Alejarme de el y su familia.
Al cortar la llamada, lagrimas caían por mis ojos... queria hablar con mis amigas...
No...
No las quería preocupar.
Mi única opción era la misma con la cual hablado antes de dichosa llamada.
Le pedí un favor.
Me dijo que le contará.
"Hazme reír" fueron las palabras que se lograban ver a través de la cámara del teléfono.
Un suspiro.
"Bueno a ti siempre te hace reir como fracaso en los juegos"
Una pequeña sonrisa se forma en mis labios.
Conto un chiste.
Dos.
Y más.
Solo una sonrisa pequeña se podía ver.
Una pequeña risa forzada.
Poco a poco se fue haciendo real.
Me hizo reír.
No cabe duda.
Ella siempre era de confiar.
No pedía que le expliara. Con solo decirle "hable con mi padre" comprendio.
"Pierde, pierde, pierde" repetía divertida. Quería molestarla un rato. Era común que lo hiciera.
"¿Que? Nop. estoy ganando" respondió segura.
"Entonces... ¡gana, gana, gana!"
Riendo miro hacia la puerta que da a la calle.
Ahí estabas viendome, con una sonrisa de lado.
Sentí algo de desánimo.
Quería seguir jugando.
Le dihe a mi amiga que me tenía que ir.
Ella asiente y me corta la llamada.
Salgo al jardín y te saludo.
Hablamos un rato a través de las rejas hasta que llega mi abuela.
Me deja salir un rato.
Seguimos hablando.
Música, trabajo de medio tiempo, etc.
Llegan unos pequeños niños con los que siempre leseamos.
Comimos los cuatro fuera de la reja de mi casa.
Era divertido.
Los duendesillos se fueron.
Solos otra vez.
Seguimos hablando. Todo bien.
"Jeisi, ¿hasta que hora piensas estar afuera? Vamos adentro."
Asentí y ella se adentró a la casa.
"¿Y? ¿Que me vas a dar?"preguntaste
"¿Te tengo que dar algo?" Respondí divertida.
"Te di mi camiseta" dijiste seguro
"Pues te la devuelvo"
"No, no, no" respondiste alterado
Reí "ok ok"
Sin darme cuenta llegamos a una pared.
Me apoyé y sonreí como si todo lo tuviera controlado.
"¿Segura que no tienes nada que darme?"
"Segura"
"¿Ni esto...?" Empezaste a señalar todo lo que traía. Mis collares, mi cadena en la muñeca, Mis lentes, todo.
Reí.
Te acercaste con cuidado "¿ni esto?" Preguntaste sobre mis labios.
Lentamente cerramos nuestros ojos haciendo chocar nuestros labios.
Fue extraño.
Yo nunca me había besado con nadie (bueno con una amiga pero era un solo choque de labios y nada mas. Eran juegos entre las dos)
Tu parecias saber como hacerlo.
Era todo lo contrario a mi.
Nos separamos y me vio a los ojos.
Rápidamente bajé la mirada. Estaba avergonzada.
Al elevar la mirada me abrazaste. Sentía mi rostro arder.
Nos besamos de nuevo.
Me quería detener. Pero no podía.
"Me tengo que ir" dije al separarnos.
Poco a poco nos alejamos y me dirigí hacia el portón.
"Uno más" suplico.
Sin darme cuenta nos estábamos besando de nuevo.
"Te mandare más música cuando llegue" dijo mientras yo cerraba con pestillo aquella puerta de metal.
"De acuerdo. Adiós." Respondí con una pequeña sonrisa en mis labios.
"Adiós".
Entre a la casa y cerré la puerta.
Fui directamente al baño.
Al cerrar la puerta y verme en el espejo intente liberarme.
Estaba feliz.
Ilustre el beso en un cuaderno.

A la mañana siguiente me sentí extraña. Pense en lo que sucedió.

No debió aver sucedido.

Eso fue un error.

Nos conocemos desde pequeños pero... no mas a fondo.

"No me conoces"

Sonaba en mi cabeza

No nos veremos casi nada después de esto.

Me iré.

Me voy de la ciudad.

No me conoces.

Ya no.

Siento mucho si soy cortante contigo pero ... es lo mejor.
Nadie me asegura que no jugabas conmigo. Nadie.

Y es lo mejor.

Nadie terminará herido.

por que eso te pasará si te quedas conmigo.

Saldras herido.

Y no serías el unico.

I'm sorry, little boy.