El infierno de Ella

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Una de las muchas chicas que se encontraban ahí, estaba apartada de la música y el humo de cigarro en una esquina con un libro de matemáticas en las manos.

Al estar en ese lugar tenia prohibido estudiar,gracias a dios existen personas como Tayler,uno de los guardias,el cual le consigue a la castaña de ojos claros libros para que aprenda lo que deberia aprender en la escuela.

Esperaba que ese dia nunca acabara,el ultimo dia en el que tendria dieciseis años. Al cumplir los diecisiete tendria que participar en prostituciones.

-Hola hermosura,¿cuanto cobras?.-pregunto un hombre frente a ella,quien habia comenzado a desatarse la corbata.

La chica alzo la vista nerviosa,cerro el libro y se puso de pie enseguida.

-Yo...yo...-tartamudeo asustada.

-Ella no es parte de la mercancía.-dijo la gruesa voz de Tayler.

Un joven de impresionante tamaño y fuerza,quien asustaba facilmente a cualquier persona.

El hombre,notoriamente ebrio,salio corriendo de ahi al ver a Tayler.La chica sonrio agradecida.

-Gracias.

-No es nada.-sonrio el.

Tayler era como un padre,amigo,hermano,para ella.La protegia y le ayudaba a estudiar.Pero...para mañana,el ya no podria hacer nada para evitar que fuese vendida.

(...)

Un mes después.

La castaña se miro al sucio espejo de la habitación.Llevaba varios moretones sobre la clavícula,el vientre y seguro también en su espalda.Se coloco la holgada blusa para volver a la cama.

El hombre de alrededor 35-45 años contaba los billetes sentado sobre la cama.Los coloco sobre la almohada y después se puso de pie para ponerse la camisa y salir de ahí sin decir ninguna palabra.

La chica tomo los billetes y saco dos de veinte dólares para esconderlos bajo el colchón una vez que el hombre se retiró.

Al momento la puerta se volvió a abrir y entro la encargada del lugar.Ella rápido coloco el resto del dinero bajo la almohada y se quedo de pie a un lado de la cama.

La mujer de cabello negro y esponjado se acerco a tomar el dinero,lo conto e hizo una mueca.

-Bueno este pago bien.-dijo ella,miro de reojo a la muchacha,quien la única prenda que llevaba encima era esa camiseta vieja y holgada que le llegaba a los muslos.-Muy bien Emma, ahora toma un baño. Quiza tengas un cliente mas el día de hoy.

-De acuerdo.-susurro la chica y fue directo a la ducha.

Abrió la llave del agua caliente y se saco la camiseta para entrar a la lluvia artificial.

El agua caliente sobre sus moretones le hizo sentir un dolor inmenso.Cerro un poco la llave para abrir la fría y que se mezclaran entre ellas logrando que el agua estuviese estable.

Todas las noches soñaba con un apuesto joven llegando a aquel horrible lugar,para sacarla de ahí y llevársela lejos.

Pero ese día aun no llegaba, y parecía estar muy lejos.

Dos días después del cumpleaños numero diecisiete de Emma, un hombre la tomo por la fuerza para abusar de ella. Afortunadamente Tayler apareció dejando moribundo a aquel hombre.

Tayler fue despedido al instante, Emma debió hacerse a la idea de que debía aceptar ser tocada y follada por los clientes.

Uno en especial, de mas de cuarenta años frecuentaba el lugar, y siempre la pedía a ella.

Emma se dejaba tocar por el hombre obligatoriamente. Pero el de todos modos la maltrataba con exceso dejándole muchos moretones por el cuerpo y haciéndola sangrar.

Emma le tenia un miedo profundo a ese hombre.

Al salir del baño, se envolvió en una toalla para buscar el atuendo adecuado para el siguiente cliente.

Se quedo de pie frente a la puerta del baño al ver a alguien sentado sobre la cama. El hombre sonrió abiertamente.

-¿Me extrañaste?

No,el no...por favor.

Otra vez...la misma pesadilla de siempre.








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-Adriana

~Heroine~ "Joey Birlem" (Adaptada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora