Jungkook nunca en su vida había dormido tan bien. O eso era lo que pensaba él en ese preciso momento.
Ambos estaban acurrucados con las piernas y brazos enredados encontrado una posición realmente cómoda. Jungkook no quería levantarse, pero para su mala suerte era día lunes y necesitaba empezar la semana de buena manera, y pues el estar así con su novio le daba las energías suficientes para no reclamar y bufar con enojo al solo poner un pie dentro del establecimiento. TaeHyung aún en su cuarto sueño murmuraba cosas sin sentidos que hacía al azabache sonreír de vez en cuando, cosa que lograba hacer siempre con su mera presencia.
Jungkook con pereza beso la frente del híbrido levantándose para asearse como debía y comer, momento que TaeHyung -su novio- aprovechaba para despertar y despedirse en la puerta con un beso que lograba poner de buen humor al más alto.
TaeHyung quien se encontraba despierto desde que Jungkook se movió fuera de la cama, camino un poco desorientado hacia la cocina escuchando el sonido del agua impactar contra las baldosas. Supuso que el pelinegro se estaba bañanando como acostumbraba a hacer todos los días.
-Q-quiero malvaviscos -murmuró en medio de un bostezo estirandose lo más que pudo hasta que escucho sus huesos sonaban por tanta presión. Quiso maullar como un gatito necesitado al ver como la bolsa de dulces estaba lejos de su alcance, pero pensó que podía hacerlo sin ayuda de nadie, él ya estaba grande y con esfuerzo podía lograr lo que se propusiera.
Observó su alrededor con interés hasta que se encontró con el banquito que ocupo la primera vez para obtener sus malvaviscos, pero rápidamente pensó en lo que dijo Jungkook por lo que con la misma rapidez que vino esa idea a su mente, se fue. Camino por la sala mirando el sillón individual que estaba cerca de la ventana y tuvo una idea, tal vez no la mejor que se le pudo ocurrir, pero serviría para tener en sus manos los suaves dulces que tanto le gustaban.
Con lentitud se posiciono detrás de el sillón y lo empujo hasta estar ya dentro de la cocina, tanto esfuerzo estaba haciendo que ni cuenta se dio que Jungkook lo seguía con la mirada y una sonrisa un tanto divertida. El azabache camino detrás de TaeHyung cerciorándose de que este no se dañara haciendo lo que sea que hacía, además estaba teniendo una linda vista de su híbrido.
Una muy buena vista.
El híbrido con un poco de dificultad se subió sobre el sillón, teniendo cuidado de no manchar la superficie suave. Una vez que estuvo sobre el objeto, estiro la mano alcanzando a tocar la punta de su objetivo. Bufo con molestia al ver como sus dedos a penas podían tener contacto con la bolsa, así que con más determinación se inclino un poco hacia adelante haciendo que el sillón se disparara hacia atrás rumbo Jungkook.
TaeHyung segundos antes de caer tomo con un gritito triunfal los malvaviscos, estaba preparado para la caída, pero unos fuertes brazos lo atraparon a centrimetros de tocar el helado piso. Suspiro con alivio al suponer que quien lo había salvado era Jungkook, pero ese alivio se convirtió en vergüenza cuando se dio la vuelta y vio el ceño fruncido junto con una mueca preocupada.
-Uhm... L-lo siento -murmuro al borde de un colapso nervioso. Los ojos oscuros de Jungkook recorrieron con preocupación todo su cuerpo en busca de posibles heridas.
-¿TaeTae, por que hiciste eso? -preguntó dejando de lado la preocupación, o al menos solo un poco.
-Yo quería malvaviscos, Kookie -murmuro con un puchero sintiéndose triste.
-No hagas pucheritos, bebé -levantó su rostro con ambas manos acariciando sus mejillas lentamente-. Me dan ganas de besarte.
-Pero, ¿y si yo quiero besitos? -preguntó moviendo su colita de un lado a otro, Jungkook sonrió de manera inconsciente y se acerco lentamente a besar esos lindos labios apetecibles, pero antes de hacerlo se detuvo y tomo la cintura de TaeHyung con ambas manos, aplastando los preciados malvaviscos entre sus cuerpos.
-Prometeme que no volverás a hacer algo como eso y te doy todos lo besitos que quieras -murmuro rozando sus narices suavemente.
-¿Por que?
-Porque no quiero verte lastimado, bebé -respondió con simpleza intentando hacer entender a TaeHyung sobre su promesa-. Además debiste pedirme ayuda.
-No quería molestarte, y bueno, esta bien -hizo nuevamente un puchero con el fin de ablandar la expresión de Jungkook, cosa que logro hacer-. Lo prometo.
-Así me gusta -se acercó a sus labios con lentitud haciendo que TaeHyung soltara un quejido en forma de prostesta, Jungkook pensó que nadie podría ser más adorable de lo que su novio lo era, y eso solamente le parecía estupendo. Unió ambos labios, labios que encajaban a la perfección. TaeHyung soltó un suspiro lleno de emociones permitiendo a su corazón sentir cada una de ellas; Jungkook se acomodo mejor acorralando a el híbrido contra la isla de la cocina sintiéndose poderoso cuando escuchó el pequeño jadeo que dio su novio al sentir su lengua abrir paso dentro de su cavidad bucal, ambos empezaron una batalla que poco tiempo después empezó a tornarse más y más intensa, el sonido que hacían sus bocas practicamente llenaban el silencio que había en aquel apartamento. El hibrido llevo ambas manos a las mejillas del mayor regocijándose de como aquel chico se estremeció bajo su tacto, ambos luego de su debido tiempo se separaron intentando recomponer su respiración errática.
El híbrido sonrió con un bello sonrojo en su rostro que hizo al pelinegro jadear. -Deja de ser tan irresistible -beso sus labios castamente suspirando con resignación-. Creo que ya no quiero ir a la universidad.
-¿Que dices, K-kookie? -murmuro sintiendo el aliento de Jungkook chocar contra su cuello-. Tienes que ir. Vamos come algo, tienes que tener energía hoy, mucha.
-¿Y si te como a ti? -pregunto con una sonrisa, haciendo a TaeHyung jadear-. Estoy seguro que eso me daría mas energía, bebé.
-No, mira Kookie -dijo pellizcando su nariz con cariño ganandose una queja por parte de Jungkook-. Debes comer, y no a mí, es importante para tu salud.
-Esta bien -bufo con fingida molestia-. Pero quiero otro besito -dijo mirando a TaeHyung, este lo miro con una ceja alzada bajando una orejita en el momento-. Solo uno, por favor.
-Aish, bueno -el castaño se paro en puntitas y beso sus labios de manera suave y pausada. Tanto que Jungkook juro sentir cada una de las emociones que iban y venían según el beso se desarrollaba-. Listo, ¿asi esta bien, Kookie?
-Así esta mucho mejor, bebé -murmuro besando su nariz de forma cariñosa.
Definitivamente amaba tener mañanas así.
...
Hola^^
Tengo unas inexplicables ganas de hacer otra obra, no sé. Estaba pensado en hacerlo tipo temática "Instagram" o un "Daddy Kink" super sukhulento para salir un poco de este libro.
Me gustaría saber que les parece la idea, idk.
–c muere ignorada–
Los amodoro con mi patata
( ˘ ³˘)❤
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My Little Hybrid»KookV
RandomTaeHyung es un híbrido gato, Jungkook es un humano. ¿Que podría salir mal? ❁KookV. ❁Fluff. ❁Completa.