C a p í t u l o 1.

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El sueño de Jack Dylan Grazer este verano es viajar a Canadá al lado de su novia de hace 1 año, Ellie Hiyar.

No precisamente por que quiera pasar más tiempo al lado de su chica, tampoco lo hace porque le interese mucho conocer aquel país, más bien él odia el frío, solo va porque quiere huir estos 3 meses de vacaciones de lo aburrido que le resulta Los Ángeles, su ciudad natal.

-Jack, bebé. Casi aterrizamos.- Dijo Ellie con voz chillona tratando de despertar a su novio del profundo sueño en que se encontraba. Sí, preferió mil veces dormir antes que soportar todo el camino a "la loca", como él suele llamarla.

-Que bien cariño, que bien.- La morena se inclinó y con entusiasmo depositó un montón de besos en sus labios. "Estás serán unas largas vacaciones". Se dijo a sí mismo.

Después de varios minutos, aterrizaron.

Al abrir la puerta del avión un frío al que no estaba acostumbrado provocó en todos escalofríos, ellos acostumbraban el fuerte calor de L.A, pero a pesar de ello se enocontraban entusiasmados por estas vacaciones.

Jack odia un poquito a Ellie, según él es una chica muy bonita, pero su actitud lo enloquece, es mandona, llorona y empalagosa, hace un esfuerzo por ignorarla, al final sólo está con ella para que nadie en casa descubra que es gay.

Aún le da miedo admitirlo porque sus padres son muy conservadores, en el instituto ya lo molestan por su bajita estatura y no estaba dispuesto a lidiar con que lo maltrataran por tener gustos distintos.

Una hora después de camino en taxi, llegaron a casa de los tíos de Ellie. No era la más grande del vecindario, pero a simple vista parecía linda y acogedora.

Mientras los padres de Hiyar bajaban el equipaje de la cajuela del taxi, Jack y Ellie tomaron sus manos, a petición de ella quien comenzó a brincar entusiasmada, Jack no podía recordar bien los nombres de los primos de su novia, Jim y Mía vienen a su mente, pero no está seguro, sólo puede recordar que la chica, Mía, es como mejor amiga de Ellie, pero casi nunca se ven.

-Vamos Jacki, te presentaré a mi familia.- Caminamos hacia la puerta y ante el primer toque salió una señora muy bonita y joven, esbozó una gran sonrisa, abrazó a Ellie.

-Tía Angela, él es mi novio Jack.

-Jack, que chico tan adorable, mucho gusto.

-Mucho gusto señorita Angela.- Le dedicó una sonrisa tierna y adorable.

Se hizo a un lado para dejar pasar a ambos chicos a su casa, Angela se quedó en la puerta esperando que su hermana y cuñado entraran con las maletas.

Al entrar a aquel bonito hogar, Ellie corrió inmediatamente a un lugar que Jack no prestó atención, estaba ocupado examinando rápidamente. Era una casa bonita y sencilla, que emanaba un sutil olor a orquídeas.

En el sofá divisó a dos personas desconocidas, al lado de Ellie: Una chica pelirroja, tenía quizás 15 años, debía ser Mía o algo así, seguía sin poder recordad su nombre. Hay mucho que destacar en ella, es bonita, tiene unos ojos azules únicos y sonrisa carismática, pero no era el tipo de preferencia de Jack.

Pero eso no le pareció importante, lo que captó toda su atención fue quien se encontraba al lado suyo.

El pequeño podría jurar que aquel era el chico más lindo que jamás en la vida había visto, lo único que pasó por su mente eran las que él describía como; preciosas facciones. Era de su edad, quizás un año o dos más grande, delgado, ojos muy oscuros, labios rojizos y pecas en casi toda su carita, tenía una sonrisa coqueta, rizos por todo su oscuro cabello. Ahora Grazer estaba totalmente agradecido de haber ido a este estúpido viaje.

-Ey, Jack, ¡Jack!.-

-Emm, ¿sí?.- Dio un pequeño brinco. Alguien chasqueó los dedos sacándolo de sus pensamientos.

-Ellos son mis primos de los que tanto te hablé, Finn y Sophia.- Se sintió un poco avergonzado por haberlos llamado diferente, pero ahora estaba seguro que jamás los olvidará.

Ambos chicos se pusieron de pie y con amigable sonrisa saludaron con un apretón de mano a Jack. Demasiado formal para su gusto, hubiese preferido un beso, de Finn, en los labios. 

-Mucho gusto, Jack.- Sonrió como bobo al escuchar cómo con su gruesa voz decía su nombre.

El día pasó bastante normal, Ellie no se separaba del lado de su novio para nada, le hacía mucha ilusión que vacacionaran juntos. Por breves minutos se iba a platicar con Sophia, Jack aprovechaba esto para admirar el rostro de Finn. Le parecía tan precioso que si tuviese que pasarse toda la vida apreciándolo y contando sus pecas, lo haría.

-Finn, cariño, ¿podrías venir un momento?.- Su madre lo llamaba desde la cocina, Finn hizo su celular a un lado y caminó tranquilamente.

Pasaron varios minutos y Finn no salía de la cocina, a nadie parecía importarle pero Jack anhelaba que saliera de la habitación para así seguirlo observando, se sentía como un acosador.

Al salir de la cocina, fue claro de qué había hablado con su madre, pues miró con dirección a Jack, quien se limitó a sonreír tratando de disimular que su corazón latía tan fuerte que parecía que saldría de su pecho. Sus manos sudaban y su voz temblaba, se sentía como una chica adolescente a punto de hablar con su platónico de toda la vida, pero no, sólo conversaría con el chico que le comenzó a gustar hace menos de una hora.

-¿Qué tal todo, Jack?.- Dijo con voz tranquila y sonrió. "Que preciosa sonrisa, ¿cómo es que de la familia de Ellie podía venir gente con estos majestuosos genes?", dijo en sus adentros.

-B-b-bien, eres Finn, ¿cierto?

-Ese mismo. Mientras estés aquí te prometo que jamás te aburrirás, Canadá es un país precioso.

Después de que comenzaron a hablar, siguieron un par de horas, sentían una conexión muy fuerte, como si se conocieran de años, lamentablemente el recuerdo de que Finn era primo de su barba y heterosexual inundaba su mente en cada momento, aunque de lo segundo no está seguro, no lograron tocar el tema.

En la noche, mientras todos se encontraban cenando en silencio, el señor Hiyar anunció una gran noticia, al menos para Jack lo era:

-Sophia y Ellie, pueden quedarse en la habitación de Sophia. Finn, Jack se quedará contigo en tu habitación sino te molesta. - Ambas soltaron un gritito muy molesto, Finn y Jack sólo se miraron con una sonrisa, en definitiva les encantaba estar juntos.

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¡Hola!, estoy escribiendo esta nueva historia de fack, por favor voten y comenten para saber si les gusta o si mejor me mato alv. Gracias por leer. <3 Aún estoy pensando lo del título y obvio voy a cambiar la portada. UwU

56 Noches A Tu Lado.| FackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora