La lancha colectivo se adelantó hoy. Viene trinando su bocina y arremetiendo a todo trapo contra las olas de la sudestada que se avecina. Tiene sentido. Todos le tienen pánico a semejante aguacero por caer sobre nuestras cabezas. Es momento de ir al refugio. Voy a seguir velando por mi supervivencia en el Delta. Puedo sobrevivir en absoluta paz en la isla. Al menos hasta la próxima vez que vuelva a sentir que estoy encerrado en un búnker contemplando el estallido del gran hongo, impulsado por algún botón rojo escondido en vaya a saber cuál cajón de cuál hombre de supuesto poder.
Podría detener la lancha, pedirle aventón, subirme y regresar al mundo que dejé atrás. Sería un sacrificio enorme. Mejor voy a preparar el espacio e hacerle saber a la lancha que estoy esperando que me traiga mi primer huésped.
Regla número 1: Prohibido el ingreso con teléfono celular.
Bienvenido.
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La Isla Sin WIFI
Short StoryQué harías si llegaras a un destino soñado pero no hay nadie? Qué harías si encima no tenés señal para comunicarte? Y si el azar te deja fuera de la civilización? Cómo serían tus días? Te comparto mi experiencia...