Amor En Tiempos De Llamarada(Newt y Tu)

CAPITULO TRES

Lo mire y le di una pequeña sonrisa, la cual me devolvió con cierta incomodidad, preparé todo con rapidez pues ya sabia que tenia que hacer, lo había hecho varias veces antes pero realmente prefiero otro tipo de trabajos en los que pueda emplear cargos más importantes...los cuales, por desgracia, nunca me dan.

-¿podrías cerrar tu puño?-pregunte mientras ataba un torniquete al rededor de el brazo del chico el solo asintió e hizo lo que le pedí, desinfecte el área para después preparar la aguja, con algunos movimientos torpes logre insertar la aguja en el lugar indicado, ¿porque carajos este chico me pone tan nerviosa?

El levantó la vista hacia mi por primera vez haciendo que lo lastimara, bajo la mirada hacia su brazo y soltó un pequeño gemido de dolor

-lo lamento-dije más roja que un tomate el solo susurro un "no hay problema", dios, su voz es demasiado sexy-¿cual es tu nombre?-pregunte nerviosa

-Newt-dijo mirando hacia abajo, Sonreí, lindo nombre, termine de sacarle sangre, arregle todo para inyectarle lo que necesitaría cuando pregunto con desconfianza-...¿que es eso?

-oh, son algunas vitaminas que te hacen falta, no te preocupes, no te haría daño...eh, ¿quieres que te ayude con tu cara?-mierda. Eso no se escuchó bien-ehm, me refiero a que..ya sabes tus heridas, no lo digo porque quiera arreglar tu cara porque crea que eres feo, porque no lo eres.- comencé a hablar demasiado rápido a lo que soltó una risita

-¡eh!, nunca me he visto en un espejo, deberías ser un poco menos cruel-dijo con una sonrisa- Eres muy joven para estar trabajando aquí,  ¿no crees?

-si, bueno, ya sabes...es más por mis padres que por mi, simplemente no puedo quedarme sin hacer nada todo el día-dije inyectando le las vitaminas a lo que soltó un pequeño quejido

-bueno, supongo que es mejor que estar en un laberinto-dijo mirándome con una seriedad inexplicable

-yo, en realidad creo que es más importante estar con la persona indicada, tal vez no te sentías cómodo allá porque no estabas con la persona correcta.

Sonrió.

-por supuesto, ahora que lo dices...creo que tienes razón acabo de llegar aquí y ya me siento cómodo, de seguro al conocer gente nueva encuentre a la persona correcta.