Amelia.Probablemente la única diferencia entre el uniforme de Timothy y el mío es que ella se molestaba en usar la corbata.
La suya caía rodeando su cuello sin anudar, en cambio yo habia decidido no usarla. No me había generado problema hasta la primera clase del primer día de tercero. La maestra se había enojado demasiado por tal ridiculez, proclamaba que mis padres debian haberse encargado de educarme correctamente de manera que supiera acatar órdenes sencillas.
—Bueno, si no hubieran muerto cuando tenía siete quizás lo habrían hecho.
E instantáneamente se detuvo y me pidió perdón por si de alguna manera me ofendió, Timothy reprimio una risa a mi lado puesto que ambas sabíamos que era mi mentira clásica cada vez que los maestros me comenzaban a sermonear. Bueno no del todo.
Papá no estaba muerto, pero desde el "accidente" en realidad no soportaba verlo, la primera semana después de lo ocurrido me quede con mi Tía Gen, la hermana de mamá que en ese entonces estaba haciendo su internado en medicina. Era lo más cercano a mamá que me quedaba y físicamente eran muy parecidas, era mi consuelo. Cuando volví a casa, antes de entrar vi la camioneta de papá estacionada y todos los recuerdos volvieron, no podía soportarlo, dolía demasiado. Le pedí que me llevara con ella de nuevo. Peleó por mi custodia contra papá y después de unos exámenes psicológicos determinaron que era lo mejor por lo menos por un tiempo. Nunca quise volver,pasaron años y la idea me generaba ansiedad,La tía Gen se convirtió en mi tutora legal y me dio su apellido, desde entonces no he vuelto a ver a papá. Me siento demasiado culpable,él no lo merecía, perdió a su esposa, a su hermano y a su hijo, no merecía perder a su hija cuando fue el mejor padre que está pudo tener.
Incluso cuando fue él quién atrajo todos los problemas esa noche.
—Tierra llamando a Amy.—Katie chasquea sus dedos en mi frente.
—¿Huh?
Pudimos haber cambiado de año, pero la jerarquía escolar seguía presente, contábamos con una de las tres mejores mesas, y no por mérito propio. Cuando entramos a primero, y no conocíamos a nadie más que al equipo de baseball pre O'Sullivan, ellos nos dieron la mano y nos crearon vida social, de pronto pasamos de ser unas chicas de primero tradicionales a convertirnos en las chicas de primero que recibían invitaciones para fiestas de último año, luego cuando me incorporé al equipo de natación nuestra popularidad aumentó, y de pronto estabamos en una de las tres, las cuales eran distribuidas en tres grupos: Los de béisbol, Las porristas y nosotras,el club de las autodestructivas, nadie nos llamaba así, pero era una broma de mal gusto de la que nos habíamos apropiado.
—Te vieron salir del auto de Samuel, por favor dime que no te estás acostando con él porque...
—No. Recuerdo la regla, "Amelia tiene prohibido acostarse con cualquier persona del Instituto"— Ruedo los ojos—.Respeto esa regla.
—La Sirena volvió a caer bajo los encantos de Lord Mojabragas.—Canturreo Timothy, metiendo su tenedor en su boca.
El apodo de O'Sullivan no se debia a que fuera el chico más atractivo de la escuela, porque aunque era indiscutiblemente caliente, Knox Heydrich se llevaba el primer lugar. Más bien porque era un provocador, coqueteaba con chicas pero muy rara vez se acostaba con una de ellas. Quizás si a alguna se le hubiera ocurrido que Samuel la queria para algo más que follar, él no las habria dejado con la calentura y las piernas cruzadas.
—No es eso... Es complejo.—Saboree mi bebida por primera vez.
—Amigos con beneficios.—Soltó Timothy
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Todas las flores de Amelia
Teen FictionLa perdición de Amelia Mason muy probablemente inicio al olvidar cerrar esa maldita ventana. La idea de un viaje a las Bahamas durante todas las vacaciones de verano sólo le permitió meter todo su equipaje en una polvorienta maleta que guardaba desd...