Capítulo 5. (Complicidad)
Espera Marta, ¿te gustaba Jesús? No podía ser. Lo acabas de conocer. No no, es imposible. Y con esta duda, me fui a descansar. O bueno, al menos a intentarlo puesto que hubo alguien que no me dejó hacerlo.
Estaba dormida cuando noté que una mano me acariciaba el pelo. Abrí los ojos y vi a mi lado a uno de los gemelos.
- ¿Jesús? ¿Qué haces aquí?.-dije frontandome los ojos.
- Subí al baño y tenias la puerta abierta. Te vi aquí tumbada tan dulcemente que no pude evitar entrar, perdón por despertarte.
- No pasa nada. Además tengo que ducharme.
Me quedé mirando a esos ojos tan bonitos que tenía, los que transmitían tanta complicidad... No podía creerme que me gustara Jesús. Porque era obvio que me gustaba. Tenía unos ojos y una sonrisa tan perfectas que me quedaba embobada mirandole.
- ¿Qué hora es Jesús?.-le pregunté para romper el hielo ya que estábamos en silencio
- Son las ocho y media.
- ¿Las ocho y media?.- dije levantandome de la cama y cogiendo en pijama puesto que me iba a duchar y no iba a salir mas.- Joder, pues sí que dormí
Jesús se rio.
*Narra Jesús*
No pude evitar reírme. Vaya chica. Además de ser guapa, estaba un poco loca y eso me gustaba. ¿Qué me pasaba con esta chica? Jamás me había llamado tanto la atención una chica como lo hizo Marta desde que la vi cuando llego por la tarde.
- Marta, ¿tú crees en el amor a primera vista?.- le pregunté.
- Ay Jesús, esas preguntas se hacen cuando no estoy apurada. Pero sí, si creo en él.-me contestó.- Y ahora, voy a ducharme así que por favor..- me dijo abriendome la puerta de su habitación que yo había cerrado cuando había entrado
- ¿Me estás echando?
- Qué va, sólo te estoy invitando a salir de mi habitación amablemente.-me sacó la lengua.- Vamos, vete, luego hablamos.
Me fui de su habitación y baje al salón donde estaba Dani.
- ¿Dónde te habías metido si se puede saber? Pensaba que te habías caído por el vater, tío
- Con Marta.-le dije sonriendo.
- Te gusta, eh. Se te nota a kilómetros.
- No sé Dani, jamás me pasó esto con ninguna chica. Tú lo sabes. Yo soy más de ir de flor en flor no de..de...-tenía miedo de decir esa palabra
- De enamorarte. -me había leído la mente.- Te está pasando como a mí con Blanca. Ya sabes que yo era como tú y mirame ahora, llevo siete meses ya con ella.
- No sé. Necesito pensar.
*Narra Marta*
Después de ducharme me puse el pijama que había comprado en Women's Secret el día antes de venirme. Era un pantalón corto de cuadros rosas azules y morados con una camiseta de tirantes. Me puse a secarme el pelo mientras pensaba en lo que había pasado antes con Jesús. ¿Le gustaría yo a él también?
Me senté encima de la cama cuando ya había acabado y llamé a mi madre.
- ¡Mamá!
- Cariño mío, ¿que tal?
- Genial. No era como yo pensaba. Los gemelos, los hijos de los amigos de Silvia y Jose son muy majos. Mañana vamos a ir a dar un paseo y me van a presentar a sus amigos
- Me alegro mucho hija, pásalo genial. Te quiero
- Y yo a ti.-colgué.
Bajé al salón donde estaban Dani y Jesús pero me quedé en la puerta puesto que estaban hablando y había oído mi nombre. ¿Qué estarían hablando de mí?
- Pero tío, ¿tú eres tonto? ¡Díselo!
- Que no le voy a decir Dani, no quiero quedar como un primo
- Marta no es de ese tipo de personas, con ella no ibas a quedar comi un primo.
- Ya bueno. Lo pienso y mañana veré lo que hago. -fue lo último que hoy decir a Jesús así que decidí entrar.
- ¿Has escuchado algo?.-preguntaron al unísono.
- ¿Yo? No, nada.-mentí.
Mentí porque si les decía que sí tenía la sensación de que íbamos a vivir una situación incomoda. Mañana me enteraría mejor de lo que estaban planeando esos dos.
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Esto sólo es el comienzo (Jesús y Daniel)
Roman pour AdolescentsEsta es la historia de Marta. Una chica Malagueña que va a vivir un verano intenso. Hará nuevos amigos y todo va a cambiar en su vida.