c i n q × c i n q

114 20 0
                                    

—Y me preguntó si no me gustaría salir con él en algún fin de semana, pero no supe qué responderle y…

Miyeon había perdido el hilo de la conversación que sus amigas llevaban.

Estaba sentada en la misma mesa de siempre, en el mismo lugar de siempre. Y sus amigas parecían charlar y charlar por horas, aunque en realidad no llevaban más de cinco o diez minutos.

—Miyeon… Mi… ¡Miyeon! —exclamó Chungha, llamando a su distraída amiga.

Miyeon regresó la mirada al centro de la mesa, y miró a sus amigas curiosas.

—¿Qué tanto piensas? —cuestionó Doyeon —. Te mirabas perdida, sumida en tu mundo —comentó, y luego el dió una mordida a su manzana.

—Solo… nada. Tonterías—. Miyeon sonrió. Y Daehwi percibió su tierna sonrisa en otra mesa —. Niñas, ¿saben dónde puedo conseguir una lista de una clase?

—Con la coordinadora Jung, pero ¿para qué quieres una lista de una clase?

—Gracias —susurró Miyeon, a la par que se levantaba de su lugar —. Tengo que irme, las veo luego —les regaló otra sonrisa y caminó hacia la salida de la cafetería.

Le llamaba la atención el detalle que su admirador tenía con ella. Y lo iba a descubrir. Porque realmente consideraba la posibilidad de conocerlo a fondo.

Postdata ; sweet v. ↔ l. daehwiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora