Clara estaba con sus anteojos puestos haciendo un trabajo en la notebook que debía entregar para el final del semestre.
Cuando más se acercaba al final del semestre más trabajo se le acumulaba además debía mantener su promedio para seguir teniendo su beca.
Su trabajo como camarera la dejaba exhausta para la clase al día siguiente. Pero como cualquier persona se acostumbra a la rutina o eso hacía creer.
Al terminar el trabajo entró a ducharse, debía estar para las 6 PM en las delicias el lugar en donde trabajaba como camarera.
Salió corriendo del baño, se vistió, agarró el bolso y las llaves de su coche en mal estado pero que era su compañero de aventuras ya que todavía la hacía llegar a destino. Prendió la radio de su auto y cantaba la música que iba sonando.
ESTÁS LEYENDO
Al fin te encontré
HumorA veces uno piensa que tiene el control de su vida pero sólo hace falta un juego del destino para hacer cambiar lo que muchas veces uno planea. Es una historia de amor que demuestra que los amores verdaderos lo encuentras sin buscar y que la vida ti...