Triangle (Harry, Niall y tú)

Capítulo 5

Luego de recorrer varias tiendas del shopping, me quedé hipnotizada en una tienda de vestidos.

-¿Quieres comprarte alguno? Y si es así, ¿cuál?-Preguntó Harry.

-Sí, me gustaría comprar uno, pero no sé cual. Me gustan todos-Musité mirando la vidriera.

-¿Así de indecisas son todas las mujeres?-Ironizó él.

-Claro. Em... me gusta ese vestido azul-Dije señalándolo.

-¿Entramos?

-Obvio-Dije sin vacilar.

-Creo que me estoy metiendo en la boca del lobo-Suspiró Harry. -Nunca saldremos de aquí.

-Harry, no me arruines el momento. Entramos, compramos el vestido y salimos ¿okey?

-Claro, sólo bromeaba-Agregó.

[Narra Harry]

Entramos rápidamente. Vicky pidió el vestido y corrió al probador. Luego de cinco minutos, salió con el vestido puesto. Le quedaba hermoso.

-¿Te gusta?-Preguntó.

-Me encanta-Respondí mirándola con fascinación. Ella se sonrojó y volvió al probador. Se puso su ropa anterior y salió con el vestido en la mano. Insistí en pagárselo hasta que se cansó, entonces aceptó.

-Eres porfiado-Replicó poniendo los ojos en blanco.

-Vete acostumbrando-Murmuré mientras salíamos de la tienda. -¿Quieres ir a Starbucks?

-Tengo calor. ¿Y si tomamos un helado?-Sugirió.

-Genial.

Fuimos hasta la heladería. Vicky pidió un helado de menta y frutilla y yo de frambuesa y chocolate. Los tomamos afuera, sentados en un banco blanco.

-¿En qué se diferencian la frutilla y la frambuesa? -Me preguntó Vicky con curiosidad. En vez de contestarle, con mi cuchara tomé un poco de mi helado de frambuesa y le di en la boca. Ella sonrió y saboreó.

-Creo que me quedo con mi frutilla-Repuso y me convidó con frutilla. Sonreí como un idiota. Me estaba enamorando.

-Tenés razón, la frutilla es mejor-Coincidí. Cuando terminamos nuestros helados, ella me dijo:

-Gracias.

-¿Por qué? -Inquirí.

-Por venir conmigo-Sonrió.

-Gracias por el pantalón-Musité.

-Gracias por el vestido-Replicó. Solté una risita nerviosa. Lentamente, me acerqué a ella y la besé. Fue un beso mágico y frenético y ella no se apartó en ningún momento. Terminé el beso y sonrió.

-Vicky, ya sé que hace apenas unos días que llegaste, pero te quería decir que me gustas-Dije.

Ella me miró sorprendida y me dijo: -Tú también me gustas.

Luego la besé intensamente.

-Harry, creo que tenemos que volver-Murmuró.

-Sí, debemos volver, linda-Coincidí. Le pasé un brazo por los hombros y ella se prendió de mi cintura. Sonreí mirándola con cariño. Tomamos un taxi y volvimos a la gran mansión. Vicky y yo nos dejamos de abrazar y entramos como si nada. Los chicos estaban por cenar.