Triangle (Harry, Niall y tú)

Capítulo 22

[Narra Harry]

-¿Por qué no abres la puerta de una buena vez?-Le preguntó Zayn a Vicky, mientras ella observaba por la mirilla. Se volteó hacia su hermano sin ninguna expresión en su rostro.

-Zayn, ¿Por qué invitaste a mi ex novio a mi cumpleaños?-Le preguntó ella a su hermano, con la voz tranquila, pero a la misma vez molesta. Eso no me gustaba, no quería ver al ex de Vicky aquí.

-¿Tu ex?-Preguntó Mary, una de las amigas de Vicky.

-¿Peter?-Inquirió Danielle. Vicky asintió. El timbre volvió a sonar.

-Juro que te arrancaré la cabeza Zayn-Amenazó Vicky, mientras se pasaba dos dedos por el cuello, representando como le iba a cortar la cabeza a su hermano. Se volteó y abrió la puerta.

-¡Hola!-Saludó una voz masculina desde afuera.

-Hola Peter, ¿cómo estás?-Le preguntó ella en tono amable.

-Muy bien, ¿y tú? ¡Feliz cumpleaños!-Exclamó extendiéndole un paquete. Mi cara debía ser épica. -Espero que te sigan gustando la misma clase de vestidos que te gustaban cuando éramos novios-Dijo él.

-¡Idiota, me has dicho el regalo!-Rió Vicky.

-Sigo siendo el mismo despistado-Admitió Peter.

-Ya lo veo-Masculló Vicky reprimiendo una sonrisa. Ellos pasaron. Peter y Zayn se saludaron cálidamente.

-¡Que lindo está ahora!-Le dijo Mary a sus amigas, que seguramente lo conocían de antes.
Tenía ganas de levantar un cartel de neón que dijera: ¡HARRY SIGUE AQUÍ! pero por desgracia, no podía.

-Sí, antes era lindo, pero ahora es más aún-Coincidió Rebecca. -¿Crees que a Vicky le gustará de nuevo?-Preguntó.

Creo que en esta noche voy a necesitar muchos carteles de neón.

-No, a ella le gusta otro-Contestó Gemma mirándome de reojo.

Oh gracias Gemma, confío en que es así.

-¡Es hermoso!-Exclamó Vicky interrumpiendo mis pensamientos. Sacó de una bolsa demasiado fina, un vestido blanco. -¡Gracias Peter!-Dijo y lo abrazó. Él le acarició el pelo, como me gustaba hacer a mí. Genial.

-Me lo voy a poner, hace rato que estoy por cambiarme, llegaste en el momento justo-Murmuró Vicky.

-Oportuno es mi segundo nombre-Dijo Peter y ambos se rieron. Vicky subió las escaleras corriendo y Peter se sentó en el living luego de saludar a todos. Salí del living y me fui a la cocina, no quería estar cerca de ese tipo.

[Narra Vicky]

El vestido que Peter me había regalado, era hermoso. Él también estaba hermoso, pero no se me pasaba por la cabeza volver con él. También me puse el saco de encaje negro que Louis me había regalado y los tacos blancos. Me maquillé y bajé.

Pude observar como Peter me miraba, y eso me gustó. Me senté a su lado y agarré un trozo de pizza.

-Te quedó hermoso el vestido-Me susurró al oído. Solté una risita nerviosa y gesticulé un <<gracias>> con los labios.

Luego de un rato todos bailamos y cuando estuve cansada, fui a la cocina por un vaso de agua. Me sorprendió ver a Harry, mirando con ojos tristes por la ventana. Me acerqué lentamente, y lo asusté. Él se sobresaltó y sonrió un poco al verme, pero luego hizo una mueca y siguió mirando por la ventana.

-Harry, ¿Qué te pasa?-Le pregunté frunciendo el ceño y mirándolo a los ojos. Él no me miró.

-Nada.

-Harry, te conozco. Algo te pasa-Mascullé.

-No te preocupes, es una estupidez-Dijo entrecerrando los ojos.

-Bueno, si no quieres contarme, no me cuentes, pero site hace sentir mejor, te puedo abrazar-Dije. Él me sonrió y lo abracé, acurrucándome. Cerré los ojos y me quedé junto a él un rato. Su fragancia era hermosa y podía sentir los latidos de su corazón. Permanecimos así en silencio, sólo disfrutando del abrazo del otro.

Finalizamos el abrazo, cuando oímos que Zayn me llamaba por el micrófono, para que fuera a cortar el pastel. Salimos de la cocina y fuimos hasta donde estaba el pastel. Me cantaron el feliz cumpleaños y luego corté varios trozos. Liam los repartía, mientras que Niall y Danielle sacaban fotos.

[Narra Harry]

Vicky estaba pasando genial, y no quería que se preocupara por mí más de la cuenta. Salí al umbral y miré el cielo nublado. Seguramente, pronto llovería.

Mi celular sonó y antes de atender, me fijé quien era. Sorprendentemente, se trataba de Romina, mi ex novia, una chica adorable, de cabello castaño oscuro, ojos grandes cafés y una sonrisa hermosa. Habíamos terminado la relación hacía varios meses, porque ella no se acostumbró a mi nueva vida de cantante.

Atendí.