Mientras dormías

6. Levantando sospechas.

Una camioneta llegó estacionándose frente a la casa de los Uchiha, un joven bajo de este, camino hacia la entrada, abrió con sumo cuidado para no hacer mucho ruido pero fue descubierto por su pequeña hermana que bajo las escaleras corriendo para recibirlo con un abrazo.

─¡Sasuke!

─Sarada, ¿aún sigues despierta?

─es que te estaba esperando

─si claro ─dijo con sarcasmo─ de seguro estabas leyendo tus historias homosexuales.

─¡cállate! ─Sasuke solo reía y se burlaba─ ¡ya cállate o despertaras a Sakura!

─¿Sakura? ¿Quién es Sakura? ─miró a la sala y vio a alguien durmiendo en el sofá.

─es la prometida de Itachi.

─ella no es la prometida de Itachi ─por todo el alboroto Sakura despertó y se alarmo un poco por lo dicho por ese tal Sasuke.

─si es, a todos nos sorprendió pero estoy segura de que te encantara -quedo intrigado por saber quién era ella.

─mejor vamos a dormir ─ambos subieron para ir a descansar.

A la mañana siguiente Sakura despertó temprano, los demás seguían durmiendo o eso creía, una voz masculina la sorprendió antes de que saliera.

─buenos días ─le saludo Sasuke sentado en las escaleras mientras bebía un café.

─¡buenos días Sasuke!

─no recuerdo habernos conocido.

─probablemente porque nunca nos hemos conocido ─le sonrió.

─claro... ─se quedó analizándola, había algo en ella que le hacía sospechar, Sakura se sentía muy incómoda, luego escucharon el claxon.

─es el taxi, ya tengo que irme ─dijo apresurada.

─Sakura...

─que...

─bienvenida a la familia

─gracias... nos vemos.

Por la tarde decidió visitar a Itachi para saber su estado, solo se quedó un momento con él, le platico lo divertida que estuvo la cena la noche anterior, como ya no tenía nada más que decir se marchó.

Antes de entrar al elevador un enfermero la detuvo.

─¡señora Uchiha, espere! ─El joven llevaba un caja en sus manos─ aquí tiene son las cosas de su esposo.

─¡Que no es mi esposo! ─enojada recibió la caja.

─perdón su... ¿prometido? ─el enfermero se retiró y ella suspiro cansada, cuando las puertas del elevador se abrieron alguien más la llamo impidiendo que entrara.

─disculpe ¿usted es la prometida de Itachi?

─... sí

─mucho gusto yo soy Shisui un amigo y compañero del trabajo, lamento mucho lo que paso y luego del accidente del mes pasado...

─¿accidente?

─sí, fue un accidente ¡¿acaso te dijo que fue mi culpa?! Ese día solo estábamos jugando y yo llevaba un lápiz en mi pantalón, es normal, soy abogado... ¡rayos! ¿Pues qué fue lo que te dijo?

─¡ok! Te escucho ─no le quedo de otra más que quedarse.

Regreso a casa ¡por fin algo de tranquilidad!, se sentó en su cama y vio la caja que le dieron, dentro estaban las pertenencias del moreno, saco una cartera y aprecio las fotos de Itachi, sonrió y suspiro por lo guapo que se veía en ellas, luego tomo una bolsa de papel, de este salió una lata de comida para gatos; se alarmo y rápido tomo un suéter, la lata, las llaves y la dirección del departamento del pelinegro.