9. ¿Tengo amnesia?

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─me dijeron que viniera rápido ¿paso algo? ─pregunto alterada.

─¡ya despertó! ─Alegre le respondió Fugaku─ debes estar ansiosa de verlo

─C-claro... ─Fugaku la dejo para ver a su hijo, Jiraya apareció ya la peli rosa lo miro esperanzada─ Jiraya ¿Qué voy a hacer?

─tranquila yo les diré, soy demasiado viejo para que me maten

─¿estás seguro?

─¡si! Vamos, yo voy detrás de ti ─Sakura entro a la habitación con los demás pero Jiraya se desvió por otro camino dejándola sola.

El moreno despertó de nuevo, sus ojos recorrieron a cada miembro presente: su mamá, su papá, su hermana, una chica desconocida, su... ¡que! ¡Una chica desconocida!

─¿Quién eres tú? ─pregunto mirándola, todos estaban confundidos y la peli rosa solo quería salir corriendo

─¡oh por Dios, tiene amnesia! ─dijo el padre y el moreno volvió a desmayarse.

─la amnesia selectiva es una condición en el que solo ciertos hechos o momento de la vida se olvidan de manera parcial, por suerte se presenta de manera leve por lo que lograra recuperarse pronto─ les explico la doctora, suspiraron aliviados y esperaron a que Itachi volviera a despertar.

─¡hola bebé! ─lo saludo con un beso en la frente al ver que despertó de nuevo

─¡al fin despiertas, campeón!

─¡hola papá! ─De nuevo fijo su mirada en la joven peli rosa confundido─ ¿quién es ella?

─no la recuerdas ¿verdad?

─¿debería?

─¡vamos, mírala bien!

─se me hace un poco familiar, ¿por qué?

─¡ya está volviendo! ─dijo emocionada Mikoto

─¿Qué está volviendo? Por favor explíquenme

─querido, tienes amnesia

─¡Amnesia! ─un enfermero entro con una charola en mano.

─aquí le traigo su gelatina

─¡¿me gusta la gelatina?! ─estaba tan confundido que ya ni sabía lo que le gustaba.

─será mejor que lo dejemos descansar, han sido demasiadas emociones por hoy.

Se despidieron de él, Sakura fue la última en salir y por el pasillo vio al viejo Jiraya.

─¿Dónde te metiste? Dijiste que me ayudarías

─solo fui al baño, ¿Qué, ya no se me permite ni siquiera ir al baño?

─¿y ahora como les diré la verdad?

─tranquila, ya te dije que yo les diré.

─¿Cuándo? ¡Cuando cumpla mis bodas de oro!

─se los diré, descuida.

Sasuke se había ofrecido a llevarla a su casa, en todo el camino solo hubo silencio.

─llegamos

─si...

─muy pronto...serás mi cuñada

─¿Quién lo diría, no? Supongo que ya no nos veremos

─...

─gracias por traerme ─se quitó el cinturón y ajo de la camioneta.

─¡Sakura!

─¿si?

─perdón por lo que dije el otro día sobre mi hermano y de ti, estoy seguro que harán una gran pareja...sabes que siempre vas a contar conmigo.

─gracias, eres un gran amigo

─¡Hmp!...amigo... ─respondió decepcionado

─nos vemos... ─cerró la puerta y Sasuke arranco marchándose.

Al otro día Sakura fue al hospital con la caja donde venían las cosas de Itachi, al entrar a la habitación lo vio durmiendo o eso creía ya que la sorprendió cuando la saludo.

─¡hola Sakura!

─¡Oh!... Eh... hola, ¿Cómo te sientes?

─bien, gracias por preguntar

─...te traje tus cosas ─dejo la caja sobre la orilla de la cama

─gracias, por favor siéntate ─le indico la silla de a lado

─C-claro... -se quedaron en silencio por varios segundos, Sakura miraba cualquier rincón de la habitación muy nerviosa debido a la mirada curiosa del moren─ una vez vi una foto tuya de niño en el periódico de cuando salvaste a unas ardillas

─nunca me llaman ni me escriben ─bromeo y Sakura río por ello, su risa lo cautivo por un momento y eso le extraño.

─cuando somos adultos no hacemos cosas heroicas

─no... ¡pero tú sí!

─saltar de las vías no es algo que haga todos los días

─yo no recuerdo haber hecho algo heroico en mi vida, una vez perseguí a un ladrón pero no lo alcance

─bueno, eso ya es algo, no cualquiera lo hubiera hecho, además he visto que cada mañana le cedes el asiento a alguien.

─eso no es heroico

─lo es para quien se lo cedes ─su forma de mirarlo, de hablar, de sonreír. Cada cosa en ella era tan extraño.

─...tú eres de esas personas de las cuales uno nunca se olvida, ¿entonces por qué no logro recordarte? ─el rostro de la joven se entristeció, por sus mentiras él trataba de recordar a alguien que nunca conoció.

─será mejor que te deje descansar, nos vemos.

Mientras dormíasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora